El esfuerzo global en datos, vital para garantizar la propiedad de la tierra

En la imagen, una pintada en una pared advierte de que la finca no está a la venta, en alusión a un fraude de ocupación y posterior venta de viviendas en Nigeria.. Fotografía tomada en Lagos, 20 de agosto de 2013. REUTERS/Akintunde Akinleye

Por Carey L. Biron

WASHINGTON (Thomson Reuters Foundation) - Hace cuatro años, Veronica Katulushi compró un pequeño terreno en las afueras de Lusaka y comenzó a construir la casa en la que planeaba jubilarse.

Mientras ahorraba dinero, la casa creció hasta que las paredes quedaron a la altura de la cabeza y Katulushi comenzó a pensar en colocar el tejado y mudarse.

Pero entonces, en un periodo caótico anterior a las elecciones nacionales en Zambia en agosto de 2016, Katulushi, de 60 años, recibió una llamada en mitad de la noche.

"Veronica, esto es un caos," recordó que le dijeron desde su futuro hogar.

"Algunas personas[quieren] explotar la tierra", le dijeron, mientras las excavadoras derribaban casas. Unas 200 casas de la zona estaban siendo demolidas y la de Katulushi fue la primera.

El pequeño terreno que había comprado a un vecino nunca había sido formalmente registrado ante las autoridades y aunque Katulushi tenía una carta del granjero que confirmaba la venta, no tenía las escrituras que demostraran que era su propiedad.

El caso finalmente llegó a los juzgados y Katulushi y otros residentes pudieron recuperar sus terrenos. Ahora están en proceso de recibir los títulos oficiales por parte del Ministerio de Tierras.

Pero un año y medio después, su casa sigue sin construirse y no se divisa ninguna indemnización en el horizonte, dijo a la Fundación Thomson Reuters.

Ejemplos como el de Katulushi han incentivado iniciativas importantes pero dispersas a lo largo de los años para mejorar la seguridad de tenencia de la tierra.

Lo que ha faltado, dicen los expertos, ha sido un esfuerzo unificado para recopilar experiencias como la de Katulushi y utilizarlas para rastrear el problema de tenencia insegura a nivel global.

"Para los derechos de la tierra, no hay datos primarios a nivel mundial. Existen opiniones de expertos, encuestas, datos administrativos, pero no hay datos primarios, datos que provengan de personas reales ", dijo Diana Fletschner, directora general de Landesa, un grupo de presión con sede en Seattle.

"Si obtenemos esta información, se transformará por completo la forma en que opera este sector", dijo.

TRANSFORMACIÓN DE DATOS

Esta transformación podría estar ahora en su etapa inicial, después de que una reunión de gobiernos y expertos a finales del año pasado diera luz verde al principal esfuerzo para establecer una medida global de tenencia segura.

Esto significa que los gobiernos nacionales empezarán ahora a recopilar datos que nunca antes han existido.

El impulso de los datos comenzó hace unos cinco años, cuando los defensores decidieron vincular sus esfuerzos al proceso para desarrollar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), un marco de 15 años contra la pobreza adoptado en 2015 por 193 países.

Debido a ese trabajo, tres partes de los ODS incluyen un foco sobre la tierra y la tenencia.

Pero aunque los 17 objetivos fueron adoptados hace más de dos años, aún continúan los trabajos detallados en cientos de indicadores, que los gobiernos nacionales recopilarán para rastrear el progreso.

Durante mucho tiempo, los índices de tenencia fueron vistos como particularmente problemáticos, incluso en peligro de ser relegados.

"La razón de esta baja clasificación fue que no había datos, los cuales son la razón por la que estamos haciendo esto", dijo Fletschner.

Pero en noviembre de 2017, una reunión del grupo de expertos que supervisa el trabajo sobre los indicadores de los ODS dio lugar a una nueva e importante fase de prueba.

Esto continúa una tendencia más larga, ya que la tierra y la tenencia han recibido una creciente atención en los últimos años al apoyarse en una serie de preocupaciones sobre el desarrollo.

"Abordar la pobreza, el cambio climático, la seguridad alimentaria, la inversión, la paz y la estabilidad: para todo esto hay que contar con un sistema sólido de gobernanza de la tierra", dijo Oumar Sylla, líder de la unidad con una alianza llamada Global Land Tool Network.

Hasta ahora, dice Sylla, alrededor del 70 por ciento de la tierra en los países en desarrollo permanece fuera del recuento público formal de la propiedad y su valor.

PERCEPCIÓN DE SEGURIDAD

Para empezar, el principal indicador en discusión rastrearía "la proporción de población adulta total con derechos sobre la tenencia segura de la tierra, con documentos legalmente reconocidos".

Pero esto también va dos pasos más lejos - registrar cómo los hogares "perciben sus derechos sobre la tierra como seguros" y luego segregar esos números por sexo y tipo de tenencia.

Al centrarse en la percepción y no únicamente en documentos legales, cualquier supervisión relacionada incluirá sistemas tradicionales de propiedad de la tierra que continúan dominando en muchas partes del mundo.

Los gobiernos también deberán desglosar estas estadísticas por sexo, impulsados por la comprensión de que la seguridad de la tenencia de una mujer a menudo puede ser radicalmente diferente de la de su familia, el nivel en el que las encuestas nacionales generalmente registran información.

Mientras que una mujer puede estar segura en su propiedad cuando es parte de un hogar en el que el cabeza de familia es un hombre, eso puede cambiar rápidamente, por ejemplo, si su esposo muere y ella vive en un país donde las autoridades solo registran el nombre de un cabeza de familia masculino.

Una situación similar podría surgir si la pareja se divorcia, o si el hombre se casa por segunda vez o en países donde las leyes no permiten que las mujeres hereden la tierra.

Algunas organizaciones han comenzado a centrarse en cómo perciben las personas la seguridad de su propia tenencia.

Quizá el mayor esfuerzo, el Índice Global de Derechos de Propiedad (IDP), apunta a difundir datos para más de 30 países para final de año.

El IDP tiene como objetivo reforzar el marco general de los ODS apoyando los esfuerzos para medir el progreso global en torno a la percepción.

Cerca del 30 por ciento de la población en Colombia y Tanzania denunciaron sentirse inseguros en cuanto a los problemas de tenencia de la propiedad en la que viven, según un informe lanzado esta semana por el IDP, al igual que un cuarto de la población en India.

En varios escenarios, las mujeres han denunciado sentirse especialmente inseguras, según el IDP, una iniciativa de la red Omidyar (que ha patrocinado junto a la Fundación Thomson Reuters la cobertura de los derechos de propiedad) y el Departamento de Desarrollo Internacional de Reino Unido.

COMPONENTE URBANO

Los resultados del IDP de estos tres países también mostraron que las percepciones de inseguridad sobre la tenencia tendían a ser especialmente altas en las ciudades, como era el caso de India y Tanzania.

Los ODS abordan este problema, por primera vez dando la misma importancia a los problemas de tenencia en zonas rurales y urbanas.

Incluso aunque en la última década ha aumentado de forma continua el foco sobre los problemas a escala global, la conversación ha sido "muy silenciosa sobre la importancia de la urbanización de la tierra", dijo Sylla de the Global Land Tool Network.

"Ahora podemos medir en entornos rurales y urbanos", dijo.

La recopilación de datos asegura que un problema permanece en el radar de un gobierno, pero también ofrece un mecanismo para abogar y exigir responsabilidad.

"Trabajamos en la vivienda e intentamos sacar a la gente de la pobreza, y los problemas de tenencia y de la tierra constityen uno de los desafíos más importantes que afronta nuestra red", dijo Jane Katz de la organización sin fines de lucro Habitat for Humanity International.

"Si no tienes un la propiedad de la tierra sobre la que se construye esa vivienda, no puedes construirla", dijo.

Para 2019, los partidarios del nuevo esfuerzo de los ODS esperan que la mitad de todos los países informen sobre la seguridad de la tenencia.