El cristiano que publicó un libro contra los besos ahora cambia de opinión

Joshua Harris reflexiona sobre el impacto de sus prédicas cuando tenía 21 años en el documental “I<span> Survived Kissing Dating Goodbye” (Foto: Yahoo).</span>
Joshua Harris reflexiona sobre el impacto de sus prédicas cuando tenía 21 años en el documental “I Survived Kissing Dating Goodbye” (Foto: Yahoo).

A los 21 años Joshua Harris era un atractivo joven estadounidense que se hizo célebre por asegurar que tener encuentros amorosos era una actitud egoísta e inmoral que sólo podía traer desencantos y corazones destrozados.

“Era joven, entusiasta, seguro y ambicioso. Y creía que tenía la respuesta para resolver los problemas que veía en las relaciones románticas”, dijo Harris, quien publicó en 1997 “A kissed dating Goodbye” (Le dije adiós a las citas), un libro sobre la abstinencia sexual que vendió más de un millón de copias.

Joshua Harris hablando a sus seguidores en un programa de televisión en la década de los 90. (Captura pantalla Youtube)
Joshua Harris hablando a sus seguidores en un programa de televisión en la década de los 90. (Captura pantalla Youtube)

Como uno de los líderes del movimiento por la castidad cristiana, Harris insistió en que en vez de buscar parejas ocasionales las personas debían comprometerse a amar a una sola persona y mantenerse virginales hasta después del matrimonio eclesiástico.

Harris calificó los deseos sexuales de impuros y sugería a las mujeres vestir con atuendos discretos para no despertar la lujuria masculina.

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La vida pastoral y familiar de Harris fue transformando su percepción de la sexualidad hasta que su ingreso en doctorado en teología en Vancouver, Canadá, en 2015 le hizo reconocer que sus afirmaciones sobre la abstinencia sexual eran erróneas.

Harris escuchó cara a cara las historias de decenas de personas que atravesaron grandes crisis existenciales y problemas personales por la influencia de su libro.

“Esas personas fueron muy valientes al contar sus historias y mostrar su vulnerabilidad. Ahora me toca a mi demostrar mi valentía, pero de una manera diferente. Cuando tenía 21 años estaba tan confiado de que tenía todas las respuestas. Pero ahora debo ser valiente para admitir que no las tengo”, dijo el pastor en un documental sobre su renovada posición sobre la sexualidad.

La convicción de Harris nació en una convención cristiana en la ciudad de Washington en 1992 donde los jóvenes clavaban cruces en los jardines frente al Capitolio con la promesa de que “El amor verdadero espera”.

Se trataba de uno de los movimientos cristianos que usaron la terminología sexual para convencer a los jóvenes de tomar el camino de la abstinencia, explicó Christine Gardner en su libro Making chastity sexy.

(Captura de pantalla Amazon)
(Captura de pantalla Amazon)

“Lamento que mi libro hiciera crear a la gente que debía hacer las cosas de una manera específica”. Aunque reconoce que los miembros de las comunidades cristianas conservadoras no estaban obligados a leer ni seguir los consejos del libro, piensa que sus afirmaciones presionaron a muchos a actuar en contra de sus deseos porque “no es fácil ir contra la corriente” en un contexto religioso.

“A la luz de las fallas que ahora veo en ‘I Kissed Dating Goodbye’ creo que lo mejor es descontinuar su publicación, así como otras fuentes suplementarias vinculadas (eso incluye dos libros que escribí posteriormente con un contenido similar). Mi editor, cuya motivación en este proceso ha sido muy importante para mí, apoya mi decisión y no volverá a imprimir el libro una vez que se vendan las copias que permanecen en inventario”.

El impacto negativo del movimiento evangélico puritano lo confirmó David Ley en un artículo publicado en 2017 en la revista Psychology Today.

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“Hay terapeutas en todo el país viendo una ola de jóvenes que sienten una vergüenza y un dolor enorme por sus impulsos, deseos y comportamientos sexuales, porque estos jóvenes encuentran una amplio mundo de sexualidad disponible fuera de los límites de esas fantasías morales”.

Otra detractora de la pureza predicada por los ultraconservadores es Linda Kay Klein, autora del libro Pura: dentro del movimiento evangélico que avergonzó a una generación de mujeres jóvenes y cómo me liberé.

(Captura pantalla Amazon)
(Captura pantalla Amazon)

Klein argumentó que las mujeres impuras no solamente son consideradas una mercancía dañada sino también personas peligrosas dentro de su comunidad. Las enseñanzas sobre la pureza eran tan poderosas que hasta las mujeres que se separaron de sus iglesias siguen teniendo problemas con el disfrute de su sexualidad.

Aunque el objetivo fundamental del movimiento de la pureza es retrasar la edad en que las niñas pierden su virginidad, en realidad lo que hace es crear un sentimiento de vergüenza de las creyentes sobre sus cuerpos y sus deseos.

El propio Harris reconoció que el movimiento se enfocó en nociones de pureza y castidad que no existen en los textos bíblicos y desvió la atención en las verdaderas enseñanzas del amor cristiano.