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El adelanto electoral en Andalucía obligará a Sánchez a resistir en el Gobierno

En la imagen de archivo, la presidenta andaluza Susana Díaz y el presidente del Gobierno en un acto en Sevilla. REUTERS/Marcelo del Pozo

MADRID (Reuters) - La presidenta andaluza Susana Díaz ha cumplido con el guión y convocado, con el plazo normativo de 54 días, elecciones anticipadas en la región para el próximo domingo dos de diciembre.

Además de testar las aspiraciones de los grupos políticos y los vaticinios que parecen anticipar los sondeos, las regionales andaluzas tendrán una derivada implícita para el gobierno central que se había comprometido a no hacer coincidir los comicios y que, según diversos analistas políticos, apurará la legislatura al menos hasta el año que viene.

El gobierno en minoría de Pedro Sánchez quiere anunciar esta semana las líneas maestras de una propuesta de Presupuestos que, a día de hoy, parece no contar con los aliados suficientes en la Cámara y que para algunos socialistas eran indispensables para seguir con el proyecto de gobierno.

Sánchez y su Ejecutivo tienen hasta mediados de octubre para presentar a Bruselas el borrador de los presupuestos pero los mensajes de su potencial aliado Unidos Podemos sobre su eventual apoyo se están endureciendo mientras que la relación con los grupos independentistas catalanes, también vitales para pasar las cuentas, tampoco pasa por su mejor momento.

Aunque las cuentas no se votarían en el parlamento antes de febrero o marzo de 2019, la falta de consenso en materia presupuestaria podría poner aún más presión sobre el gobierno del PSOE, a quien los sondeos otorgan una estrecha victoria en unas hipotéticas elecciones.

ENSAYO GENERAL

El adelanto electoral en Andalucía - los comicios estaban previstos para marzo - se produce después de que Díaz y su gobierno en minoría perdiesen el apoyo de investidura de Ciudadanos y meses antes de que los tribunales se pronuncien sobre uno de los casos de corrupción política más importantes de la región gobernada ininterrumpidamente por el PSOE los últimos 37 años.

Pese a las peculiaridades de la cita - el peor momento para al PSOE en su bastión regional y las diversas crisis ministeriales en el jovencísimo Ejecutivo de Sánchez - el resultado andaluz será visto al menos parcialmente como un ensayo de las reñidas elecciones generales por llegar.

Al margen de lo que suceda con la gobernabilidad nacional y la catalana - sobre la que también planea permanentemente el fantasma de las anticipadas - en mayo de 2019 está previsto que se celebren elecciones municipales, autonómicas (salvo en Andalucía, Cataluña, País Vasco o Galicia) y europeas.

(Información de Carlos Ruano; Editado por Andrés González)