Economía palestina al borde del colapso por suspensión de transferencias de impuestos

Por Ali Sawafta RAMALA, Cisjordania (Reuters) - La decisión de Israel de retener 130 millones de dólares al mes, correspondientes a los ingresos por impuestos que recauda en representación de Palestina, está ahogando la economía palestina y dejando a su sistema bancario peligrosamente expuesto, dijo el miércoles el gobernador del banco central palestino. Israel detuvo en enero las transferencias de ingresos por impuestos y aranceles aduaneros, en protesta por la decisión de Palestina de unirse a la Corte Penal Internacional (CPI), que se hace efectiva a partir del 1 de abril. Bajo la normativa de la CPI, la membresía de Palestina permitirá al tribunal tener jurisdicción sobre los crímenes de guerra cometidos por cualquiera en territorio palestino. Desde enero, la economía palestina dejó de recibir más de 500 millones de dólares, lo que llevó a la Autoridad Palestina, que administra Cisjordania, a reducir los sueldos de casi todos sus empleados en un 40 por ciento y a recurrir a un presupuesto de emergencia. El Gobierno además está en peligro de no poder cumplir con los pagos de sus créditos, según Jihad al-Wazir, gobernador de la Autoridad Monetaria Palestina (AMP), el banco central palestino. Israel tomó medidas similares en 2006, 2007 y 2008, pero esta vez los riesgos serían mayores y hacen que la economía palestina quede en una mayor dependencia de los donantes internacionales, que en los últimos meses no han cumplido con sus compromisos. "Informamos a la Autoridad Palestina que hemos llegado a los límites permitidos para ellos, o que estamos por llegar a ese punto, y que los bancos ya no van a poder seguir financiándolos", dijo a Reuters el gobernador del banco central, Jihad al-Wazir. El déficit ya es cercano al 15 por ciento del PIB. Y las transferencias de impuestos representan dos tercios de los ingresos. El Ejército israelí advirtió al Gobierno que la retención de ingresos está avivando la violencia en Cisjordania. Existe la posibilidad de que Israel reanude los pagos una vez que el nuevo Gobierno esté instalado, aunque hasta ahora no hay señales de que vaya a hacerlo. Pero dado que Palestina no ha señalado que vaya a dejar sin efecto su ingreso a la CPI, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, podría decidir mantener la presión. El economista Naser Abdel-Karim estima que los empleados de la Autoridad Palestina le deben a los bancos palestinos entre 600 y 700 millones de dólares, mientras que la Autoridad Palestina adeuda casi 1.500 millones de dólares -el límite permitido por AMP- a esas mismas instituciones. "Se teme que la autoridad pueda colapsar en términos de (...) funciones y provisión de servicios", dijo Abdel-Karim. (Reporte adicional de Nidal al-Mughrabi en Gaza; escritoi por Luke Baker; Editado en español por Janisse Huambachano)