Anuncios
Elecciones México 2024:

Cobertura Especial | LO ÚLTIMO

La economía de Italia empezó a sufrir la expansión del coronavirus

ROMA.- En medio de pronósticos que prevén un golpe devastador para la economía, el coronavirus continuó ayer su expansión en territorio italiano. El número de víctimas mortales por el virus subió ayer a 12 (falleció un hombre de 70 años de la región de Lombardía "ya afectado por otras patologías") y entre los nuevos 400 contagiados confirmaron la presencia de los primeros seis menores, que de todos modos no están graves.

Attilio Fontana, el presidente de Lombardía, la región más afectada, con 258 casos, confirmó el contagio de seis chicos. De ellos, cuatro (una niña de 4 años, dos de diez y uno de 15) son de la "zona roja", el área de 11 pueblos en la provincia de Lodi que fue puesta en cuarentena y es considerada uno de los focos del brote. El segundo es otra zona del Véneto, la segunda región más afectada, con 71 casos.

Solo dos menores se encuentran internados, pero no en estado crítico, por una epidemia que provocó una verdadera psicosis y puso de rodillas a Italia, que se siente cada vez más aislada, ya que se multiplican los países europeos y del resto del mundo que desaconsejan viajar hasta il bel paese. Y los italianos comienzan a sentirse los "apestados" de Europa.

Para dar un idea, el ministro de Salud irlandés, Simon Harris, anunció que quiere cancelar el partido de rugby Irlanda-Italia previsto para el sábado 7 de marzo en Dublín, para evitar la "invasión" de 5000 hinchas italianos. Disney World, por otro lado, puso en cuarentena a seis jóvenes empleados italianos del parque de Florida, Estados Unidos, que habían regresado de Milán.

"Es el momento de bajar los tonos, debemos detener el pánico", pidió el primer ministro, Giuseppe Conte, consciente de que en los últimos días se ha desencadenado un alarmismo desproporcionado, que está poniendo en jaque a Italia.

Lo que realmente asusta ahora, junto a la emergencia sanitaria, son las consecuencias económicas que las drásticas restricciones a la circulación impuestas en el norte -donde se encuentran los dos focos- tendrán para toda la península. Tanto es así que el gobierno pidió a la RAI, la televisión estatal, que también enfríe los tonos y el canciller, Luigi Di Maio, está preparando un plan en "contra de las fake news sobre nosotros en el resto del mundo".

Trabajo desde casa

En la zona más productiva del norte del país -donde se ha decidido cerrar escuelas, universidades, cines, teatros, museos-, muchas empresas dejan que sus empleados trabajen desde casa. Pero las previsiones de los economistas son impiadosas y prevén una nueva recesión ya que el área afectada de Lombardía (región cuya capital es Milán) representa el 12% del PBI italiano y el 2% del de la eurozona. "Sólo en la 'zona roja' hay 63 empresas medianas, sin contar negocios y actividades comerciales, con más de 4000 empleados y facturaciones por 1700 millones de euros. "Intervenir de modo drástico fue fundamental, pero las medidas deben ser proporcionadas y no contraproducentes", dijo un ministro.

Según Confocommercio, la confederación general italiana de las empresas, si la crisis se prolonga hasta junio podría costar entre 5000 y 7000 millones de euros. El mismo ente calculó que 60.000 puestos de trabajo se encuentran amenazados. En este marco una pésima noticia fue la postergación del tradicional Salone del Mobile (Salón del Mueble), evento internacional que estaba previsto para abril, pero que se pasó a junio. El sector de las ferias en Italia genera unos 60.000 millones de euros de negocios y atrae a más de 20 millones de visitantes al año.

En tanto, otro de los sectores golpeados es el turismo, que registró en las últimas horas el 40% de cancelaciones de hoteles.

El gobierno, que destinó una primera partida de 20 millones de euros a la emergencia y decretó que los habitantes de las "zonas rojas" tengan exenciones del pago de impuestos y otros beneficios económicos, está siendo muy criticado por cómo está manejando la emergencia. Y, según el diario La Stampa, anteayer hasta fue insultado por el gobernador de Lombardía, Fontana, que lo llamó "charlatán" durante una tensa videoconferencia junto a los presidentes de todas las regiones de Italia.

No por nada Fontana definió el coronavirus "poco más que una normal gripe". Y Walter Ricciardi, miembro del comité ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y ahora consultor del Ministerio de Salud, intentó calmar las aguas al repetir una y otra vez que "el 95% de los contagiados se cura" y que los 12 muertos registrados hasta ahora "ya estaban gravemente enfermos". "De 100 personas enfermas, 80 se curan espontáneamente, 15 tienen problemas serios pero manejables en ámbito médico, el 5% es gravísimo y de este, el 3% muere", explicó Ricciardi.

En este contexto, antes de comenzar ayer la tradicional audiencia general de los miércoles, el Papa, ajeno a la psicosis, como siempre detuvo su papamóvil para saludar y besar niños presentes en la Plaza de San Pedro, donde había mucha menos gente que lo normal.

El Papa ayer salió del Vaticano para celebrar en la iglesia San Saba, en el barrio del Aventino, la misa del miércoles de cenizas, que abre la Cuaresma. El párroco de Castiglione d'Adda, una de las 11 comunas en cuarentena de la "zona roja" de Lombardía, transmitió su misa online.