Divina comida: la anécdota que emocionó a Coco Sily

El lunes feriado marcó una nueva ronda de Divina comida, el programa de Telefe en el que cinco famosos comparten una cena a lo largo de todos los días de la semana. Esta vez, el quinteto está compuesto por Coco Sily, Floppy Tesouro, Denise Dumas, Boy Olmi y Grego Rosello. A quien le tocó ser anfitrión fue al protagonista de La cátedra del macho.

Dentro de su casa, Coco Sily se encargó de hacer frente a las cámaras un minitour, y así mostró un cuadro de Alberto Olmedo, muchos recuerdos familiares y hasta reveló que su tío abuelo llegó a ser Primer ministro en Lima. Unas de las particularidades de su casa es una gran caja con fichas de póquer, un juego que el comediante ama con pasión: "Yo aprendí a jugarlo sentado en las rodillas de mi papá. Después de la actuación, mi pasión es el póquer".

Poco a poco comenzaron a llegar todos los invitados. Poco antes de conocerse, Grego confesó: "Soy el menos famoso de los cinco", mientras Floppy opinaba: "Creo que nos vamos a llevar muy bien". Con respecto al menú, como entrada Coco hizo "envueltos, rellenos y aplastados", seguidos por "kebbe cuando Mebbe", para finalizar con un postre bautizado como "La prohibida está al horno".

Mientras los cinco brindaban tomando whisky, una de las bebidas favoritas del anfitrión, todos comenzaron a comentar qué tanto se conocían o si alguna vez habían charlado. Y en ese momento, Coco compartió un emotivo recuerdo: "El día en el que nació mi hijo yo bajo a comprar un oso, estaba tan emocionado y tan conmocionado, y no nos conocíamos. Bajo del sanatorio y me encuentro con Carola y Boy, a los que conocía de la tele. Y yo se lo tenía que contar a alguien, y les dije: "¡Chicos, acaba de nacer mi hijo!". Y me emociono, y ellos me dijeron: "¿cómo fue todo? Festejemos, brindemos!". Por su parte, Olmi también conmovido reflexionó: "Tiene mucha bondad atrás del machote, hay una sensibilidad extrema".

Una vez sentados alrededor de la mesa, Sily también dio su punto de vista sobre qué significado tiene para él esa idea del macho en los tiempos que corren: "Cuando vino esta maravillosa revolución feminista dije: "cagué, ¿cómo continúo con el estigma de la palabra?", porque yo no hacía humor que tuviera que ver con el machismo, pero en lo que yo hago la palabra macho era un referente del tipo de barrio. Sin embargo, la gente no dejó de venir. De lo que yo hablo es de costumbrismo, y la gente se ríe con cómo yo cuento la vida nuestra. Esta deconstrucción fue brava para un cincuentón, es un concepto cultural".

De esa manera culminó una primera noche llena de recuerdos y humor, protagonizada por un quinteto que aún tiene mucho camino por recorrer.