Anuncios
Elecciones México 2024:

Cobertura Especial | LO ÚLTIMO

Director del FCE Colombia, puesto por Taibo, es acusado de corrupción

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 30 (EL UNIVERSAL).- El director del Fondo de Cultura Económica (FCE) Paco Ignacio Taibo II fue informado acerca de que Nahum Montt, director de la filial colombiana, cometió presuntas irregularidades, actos de corrupción y nepotismo, como entregar contratos a tres empresas de su hijo, hacer un autopréstamo y realizar gastos personales con cargo a la paraestatal por hasta 5 mil dólares mensuales. Sin embargo, continúa el puesto.

La asociación civil Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, y la Liga contra el silencio, que agrupa a quince medios de comunicación y colaboradores en Colombia, publicaron hoy en sus páginas oficiales y redes sociales, un reportaje en el que documentan con decenas de fuentes y documentos, las irregularidades cometidas por Montt; además, ofrece entrevistas con Taibo, quien aseguró: "La corrupción no es lo mío y donde la encuentro, corto cabezas".

Sin embargo, Taibo II reconoció que estaba enterado desde el año pasado y que había hablado "bastante fuerte" con Montt sobre las irregularidades, pero añadió que lo mantendrá en el cargo "hasta que salgamos de la epidemia del Covid y veamos los resultados del cierre de los contratos, las mejoras de las sucursales y el pago del dinero corporativo que fue gastado indebidamente". De acuerdo con el reportaje que ya ha sido retomado por medios colombianos como "El espectador", en los últimos meses las empresas del hijo de Montt cobraron alrededor de 1 millón de pesos mensuales por contratos con la editorial mexicana.

Montt fue designado por Taibo II como director de la filial colombiana en abril del 2019 y en un año, según Mexicanos contra la Corrupción y la Liga contra el silencio, firmó contratos millonarios entre el FCE y tres sociedades sin trayectoria a las que su hijo estaba vinculado; recibió una queja ante el Ministerio de Trabajo por un presunto despido colectivo, e incurrió en el uso irregular de la tarjeta de crédito corporativa. Para Taibo estos actos de corrupción fueron "fenómenos, sino de corrupción, de administración incorrecta". El reportaje también documenta que el mismo día en que el FCE anunció a Nahum Montt como director, en Bogotá se creó la sociedad Muysua SAS que, según sus estatutos, tenía como objeto "prestar asesorías y consultorías de cualquier tipo a sociedades colombianas o extranjeras” y “administrar por cuenta propia o ajena toda clase de bienes muebles o inmuebles", cuatro accionistas se dividían las acciones, entre ellos Germán Montt, hijo de Nahum.

Esta empresa que tenía sólo 9 días de ser creada y sin experiencia de ningún tipo, fue contratada por Nahum para diseñar y brindar para el FCE un "modelo de rentabilización de negocio" a cambio de 216 millones de pesos colombianos –323 mil 815 pesos mexicanos—. También se le contrató para la asesoría del Museo Gabriel García Márquez, por la suma de 11.9 millones de pesos colombianos, unos 72 mil 932 pesos mexicanos. Además representantes de Muysua SAS y otros accionistas constituyeron una sociedad llamada Aruma BPO Logistic SAS, y que a un sólo día nacer, firmó un contrato de prestación de servicios con el FCE para manejar, por un periodo de diez años, la distribución y el almacenamiento de sus libros. Así, la editorial se comprometía a pagarle 40 millones de pesos colombianos –245 mil 151 pesos mexicanos– mensuales durante los primeros cuatro meses, y 55 millones –337 mil pesos mexicanos– a partir del quinto mes.

Al ser cuestionado por estas irregularidades, Montt respondió a Mexicanos contra la Corrupción y a la Liga contra del Silencio: "¿En cuál empresa colombiana se les prohíben a los hijos entrar a apoyar a sus padres?". Taibo confirmó que estaba enterado, dijo que incluso Montt vino a México para hacer una revisión del caso, y justificó que hasta el momento Montt se mantenga en el cargo y que no haya ninguna sanción: "Estamos ante una situación muy complicada: si aceptábamos su renuncia, en enero, nos quedábamos con los contratos porque él los había firmado y los grados de autonomía de las filiales del fondo son muy raros".

Taibo también aseguró que los contratos se anularon y que se le pidió pagar los gastos no justificados que hizo con la tarjeta corporativa. "Está pagándolo de su sueldo y la pregunta que tú tienes en la cabeza y la que yo tengo también es: ¿hicimos bien o debimos haber aceptado la renuncia?", dijo.