Deuda: el Presidente siguió con "tranquilidad" los avances de la negociación desde Olivos

Lejos del clima de ansiedad y optimismo que se vivió en los mercados y las redes sociales por el avance de las negociaciones entre el Gobierno y los principales acreedores del país, en la quinta presidencial de Olivos todo era tranquilidad. El presidente Alberto Fernández estuvo todo el día en la residencia oficial y mantuvo reuniones con parte de su equipo.

"Está tranquilo revisando temas de agenda", fue la descripción de uno de sus principales colaboradores. Hasta las 16, según confirmaron desde su entorno a LA NACION, el Presidente no habló con el ministro de Economía, Martín Guzmán.

Silencios y gestos: sin hablar, Cristina Kirchner manda mensajes que sacuden el tablero del Gobierno

El jefe del Estado, que almorzó con el secretario General de la Presidencia, Julio Vitobello, y el secretario de Comunicación, Juan Pablo Biondi, repasó los detalles de lo que será mañana el relanzamiento del plan Procrear, que en una primera etapa tendrá dos líneas de crédito destinadas a reformas de viviendas. Y cerró el día junto al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; Vitobello y Biondi, en Olivos.

A horas del vencimiento para el cierre de la última oferta de canje de la deuda de la Argentina, Guzmán y los tres grupos de bonistas, el Grupo Ad Hoc, el Grupo Exchange y el Comité de Acreedores de la Argentina (ACC, según sus siglas en inglés) llegaron a un entendimiento preliminar para intentar llegar a un acuerdo.

Como publicó LA NACION, luego de semanas de cruces mediáticos, el Gobierno y los tres grupos que reúnen a los principales fondos que poseen títulos públicos bajo legislación extranjera retomaron las negociaciones durante el fin de semana vía Zoom para llegar al arreglo económico que cerrará la última brecha entre la oferta oficial, valuada en US$53,5, y la de los fondos, en US$55,7. Esa brecha -que el mercado consideraba mínima y muy salvable-equivalía a unos US$2000 millones durante dos décadas.

Guzmán, en tanto, mantuvo varias reuniones de peso político. Por la mañana, según publicó Clarín, visitó a la vicepresidenta Cristina Kirchner para contarle los últimos avances de la negociación con los bonistas. Después, participó vía videoconferencia de una reunión con el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y el bloque de diputados del Frente de Todos, que lidera Máximo Kirchner.

Fue en ese encuentro que el titular del Palacio de Hacienda dejó un mensaje de prudencia. "Todavía falta, estamos negociando, pero falta", les dijo el funcionario.

A las 18, cruzó desde su oficina hasta la Casa Rosada, donde estuvo reunido con los ministros Eduardo de Pedro (Interior) y Matías Kulfas (Desarrollo Productivo) y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, para analizar las prioridades e iniciativas de desarrollo. También firmaron un convenio en el marco del Programa de Asistencia Financiera para la Emergencia Sanitaria, a través de un préstamo no reembolsable del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).