Descubren un nuevo tipo de fotosíntesis que podría cambiar la búsqueda de vida extraterrestre y hasta ayudar a terraformar Marte
Esta semana el revuelo y la expectación de los medios científicos han girado alrededor de un fascinante artículo publicado en Science cuyas aplicaciones pueden dar la vuelta a muchos campos de la ciencia. La protagonista ha sido la fotosíntesis, un proceso vital para la vida en nuestro planeta que, a pesar de ser uno de los pilares fundamentales de nuestra amplia biodiversidad, aún no conocemos bien y sigue ofreciéndonos sorpresas en su funcionamiento.
Las plantas, las algas y un amplio abanico de bacterias utilizan la luz solar para transformar materia inorgánica en orgánica, ofreciendo energía al resto de especies y convirtiéndose así en un elemento básico para la vida en la Tierra. Hasta ahora pensábamos que en la fotosíntesis se utilizaba un rango concreto dentro del espectro electromagnético de la luz solar, sin embargo el reciente estudio amplía la gama de luz que algunas bacterias son capaces de utilizar para realizar la fotosíntesis.
En resumen, el nuevo trabajo ha descubierto que existen organismos, como las cianobacterias también conocidas como algas verdeazuladas, que son capaces de absorber dióxido de carbono y liberar oxígeno, incluso en algunos de los ambientes más extremos del planeta. Lo interesante ahora es que un tipo concreto de estas cianobacterias, Chroococcidiopsis thermalis, es capaz de realizar la fotosíntesis en longitudes de onda que hasta ahora se pensaban imposibles.
Los científicos lo denominan “límite rojo” de la fotosíntesis y se situaba en longitudes de onda de hasta 700 nanómetros. Esta especie de cianobacteria puede realizar la fotosíntesis en longitudes de onda de hasta 750 nanómetros, lo que significa que puede llevar a cabo este proceso incluso en condiciones de poca luz y con una cantidad de energía muy inferior a la que creíamos.
Los investigadores responsables del estudio lo han calificado como “un fotosistema de baja energía sin precedentes” puesto que es capaz de realizar la fotosíntesis en unas condiciones mucho más duras de lo que teníamos pensado. Como podéis imaginar este descubrimiento tiene implicaciones importantes y abre posibilidades que no habíamos considerado.
Por ejemplo en la búsqueda de vida extraterrestre. Muchos de los exoplanetas que hemos descubierto se habían descartado como difícilmente habitables al estar demasiado lejos de su estrella y recibir muy poca luz. Con un rango mayor en las condiciones para la fotosíntesis deberemos ser más flexibles a la hora de considerar las posibilidades de vida en muchos planetas.
Y por supuesto, este nuevo tipo de fotosíntesis también da opciones realmente fascinantes. En el futuro la necesidad de adaptar las necesidades para la vida a otros planetas ahora inertes, como Marte, puede ser mucho más fácil si contamos con organismos que realicen la fotosíntesis en condiciones difíciles y ambientes extremos. Si dejamos volar la imaginación podríamos contemplar la posibilidad de utilizar estas cianobacterias para acondicionar otros mundos gracias a su capacidad de fotosíntesis en una gama más amplia de luz.
Sea como sea, el descubrimiento de este nuevo tipo de fotosíntesis vuelve a demostrar que la ciencia es una herramienta maravillosa capaz de sorprendernos incluso con temas tan básicos como los que ya creíamos saber desde el colegio.
Referencias científicas y más información:
Dennis J. Nürnberg, Jennifer Morton, Stefano Santabarbara, Andrea Fantuzzi, A. William Rutherford1 “Photochemistry beyond the red limit in chlorophyll f–containing photosystems” Science 15 Jun 2018: Vol. 360, Issue 6394, pp. 1210-1213 DOI: 10.1126/science.aar8313
Josh Gabbatiss “New type of photosynthesis discovered that could change hunt for alien life” The Independient