Robert Lewandowski es uno de los mejores delanteros en el mundo, aunque en el partido contra México, correspondiente al Grupo B de Qatar 2022, no pudo mostrar su calidad. Por si fuera poco, Guillermo Ochoa le atajó un penal que posteriormente significó el empate entre ambas naciones. Previo al encuentro, analistas y periodistas pintaban a Lewandowski como una amenaza que al final de cuentas dejó mucho que desear.

Al minuto 55, el árbitro central pitó penal tras una batalla por el esférico donde Héctor Moreno y el Tito forcejeaban por el balón. El colegiado consideró que era falta del central mexicano, fue al VAR y apuntó hacia el punto de manchón de cal para otorgar la pena máxima a favor de los polacos. Con aparente nervio, Robert miró al silbante dos veces, tomó aire hasta en cinco ocasiones y disparó para que Ochoa le atajara el disparo.

El delantero se llevó las manos a la cabeza ante la evidente pifiada. El atacante había dejado pasar una oportunidad gigantesca para anotar un tanto que diera la victoria posterior a Polonia. Eligió su derecha, misma que Ochoa adivinó y le frustró sus ganas de gritar un gol.

De esa manera, el capitán del conjunto Polaco erró ante el capitán del Tricolor, situación que nunca se había dado en la historia del balompié. Los debates y los análisis antes de que rodara el balón tenían como principal peligro de Polonia a Robert Lewandowski. En su primer partido del mundial apenas pudo aparecer en algunas acciones.

Su fallo y posterior división de puntos entre Polonia y México ha puesto al Grupo B más cerrado que nunca. Con la sorpresiva victoria de Arabia Saudita ante Argentina, los asiáticos se postran en la cima del sector; seguido de Polonia y México con un punto cada uno y en el fondo la Albiceleste con cero unidades.

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