Carlos Sainz protagonizó un dramático momento cuando peleaba por el segundo escalón del podio. El español que estaba muy cerca de Max Verstappen (Red Bull), tuvo que abandonar la competencia luego de la rotura del motor de su Ferrari que, además, ardió en llamas. Mientras buscaba el lugar para superar al actual campeón, comenzó a salir un humo blanco del monoplaza y automáticamente se salió de pista para no entorpecer a los rivales que venía por derás.

Sin embargo, al intentar detener el Ferrari, empezaron a salir llamas del impulsor y cada vez fue peor. En pocos segundos el fuego creció y Saínz no lograba salir del cockpit teniendo en cuenta que el auto seguía en movimiento. Inmediatamente apareció un auxiliar que logró frenarlo y apagó el incendio.

Las imágenes recorren las redes sociales y seguramente será uno de los momentos más recordados de una apasionante temporada de la Fórmula 1. "Apareció de golpe el problema. Hay que ser positivo porque estamos yendo rápido y los puntos nos hubiesen empujado para no quedar atrás. Los coches están rápido, eso es lo positivo”, expresó.

Desolado, caminó unos metros y quedó sentado al borde de la pista, con el casco aún colocado, tratando de asimilar su mala fortuna cuando solo restaban 14 giros para el final de una competencia en la que todo venía de maravillas. Sainz venía en un gran momento, ya que la semana última celebró el primer lugar obtenido en el accidentado Gran Premio de Silverstone.