D'Alessandro, el campeón olímpico que lleva talento y experiencia a Uruguay

Montevideo, 19 feb (EFE).- Reconocido por el gran talento que mostró desde su debut en la Primera División, el argentino Andrés Nicolás D'Alessandro afronta a sus casi 40 años un nuevo desafío: regar de fútbol las canchas uruguayas.

Refuerzo del Nacional para la temporada 2021, el 'Cabezón' ilusiona a la parcialidad tricolor, que sueña con los goles que puedan surgir de su pierna izquierda.

Encarador y atrevido, D'Alessandro mostró que es distinto desde que en 1999 dio sus primeros pasos en el River Plate.

De hecho, dos años después se consagró campeón del mundo sub-20 en un torneo que lo tuvo como una de las figuras más destacadas.

Con la camiseta de la banda roja, el argentino compartió plantilla con reconocidos jugadores como Martín Demichelis, Mario Yepes, Esteban 'Cuchu' Cambiasso, Javier Saviola y el 'Burrito' Ariel Ortega. Sin embargo, la más recordada para muchos es la sociedad que armó con Fernando Cavenaghi.

Juntos, el '9' y el '10' fueron campeones del Clausura en 2002 y 2003, año en que anotaron un tanto cada uno en un recordado clásico en la cancha del Boca Juniors donde los entonces dirigidos por el chileno Manuel Pellegrini igualaron 2-2 con los de Carlos Bianchi.

Sus buenas actuaciones llevaron a que varios equipos pusieran sus ojos en él, aunque fue el Wolfsburgo de Alemania el que finalmente consiguió ficharlo.

Estando allí, no solo formó parte de una plantilla que logró lo que hasta ese momento era una de las mejores campañas en la historia del club, sino que también obtuvo uno de los reconocimientos más grandes que existen en el deporte: el oro olímpico en Atenas 2004.

Pese a esto, ese año también le mostró al 'Cabezón' la cara de la derrota en una increíble final que Brasil se llevó en los penaltis y en la que él se encontró con las manos del portero Julio César.

Tras su paso por la Bundesliga, D'Alessandro se mudó por poco tiempo a Inglaterra, donde jugó en el Portsmouth con la camiseta número 4.

"Fue una experiencia muy positiva", dijo el argentino durante una entrevista con ESPN en 2011. Allí no solo consiguió evitar el descenso con un equipo que cuando llegó estaba en el último lugar de la tabla, sino que también nació su hija.

Para la temporada 2006-2007, el futbolista se fue a España, donde vistió los colores del Zaragoza, un equipo que por ese entonces jugaba en la Primera División y tenía figuras de la talla de Gerard Piqué, Pablo Aimar y los hermanos Gabriel y Diego Milito.

Allí, según dijo en la mencionada entrevista, se encontró con el fútbol europeo que más le gustó.

Luego de 18 meses, D'Alessandro abandonó Zaragoza y regresó a su Buenos Aires natal, aunque no para jugar en el River Plate, sino en el San Lorenzo de Almagro.

En ese club, y nuevamente bajo las órdenes de Ramón Díaz, compartió plantilla con Gonzalo Bergessio, el actual capitán del Nacional con quien ya se reencontró en los entrenamientos.

Tiempo después, partió a Brasil, donde encontró en el Internacional un equipo que lo transformó en ídolo y que lo llevó a ganar los más prestigiosos torneos internacionales a nivel continental.

Campeón de la Sudamericana en 2008 y de la Libertadores en 2010, D'Alessandro formó parte algunos de los títulos más importantes conseguidos por el conjunto de Porto Alegre.

Tras 12 años allí, el argentino cambiará el estadio de Beira-Rio por el Gran Parque Central, donde no solo jugó para su anterior equipo, sino que también lo hizo en la despedida del 'Chino' Álvaro Recoba, actual ayudante de campo en el Nacional.

Después de varios años llevando su fútbol por el mundo, ahora D'Alessandro se meterá de lleno en un campeonato que, a lo largo de su historia, se nutrió del talento argentino en diversas ocasiones.

Rinaldo Martino, José 'Nene Sanfilippo, Luis Artime y Héctor Rial son algunos de sus compatriotas que ya se enfundaron la camiseta del tricolor.

También, el 'Muñeco' Marcelo Gallardo, quien no solo se retiró allí, sino que además comenzó su laureada carrera como entrenador, esa que en 2016 lo llevó a dirigir al 'Cabezón' en un corto paso que este volvió a tener por el River Plate.

Ahora, llegó el turno de D'Alessandro, otro argentino que ilusiona a los hinchas y que promete desplegar buen fútbol en Uruguay en un equipo en el que aseguró que encontró "un nuevo desafío" y en el que resaltó que cumplirá "otro sueño profesional".

Santiago Carbone

(c) Agencia EFE