Guatemala endurece medidas restrictivas por COVID-19

CIUDAD DE GUATEMALA (AP) — Guatemala anunció el sábado medidas restrictivas de movilidad más drásticas a fin de frenar la propagación del nuevo coronavirus en el país centroamericano.

De acuerdo con las nuevas medidas, los guatemaltecos no podrán salir del departamento donde viven a partir del domingo y hasta el 12 de abril a la medianoche, salvo aquellos que comprueben que laboran en otras zonas.

“Se requiere que permanezcamos en nuestras casas”, declaró el mandatario Alejandro Giammattei.

Giammattei indicó que queda prohibida la circulación del tránsito de tipo recreativo, social o familiar vía terrestre, aérea y marítima, y agregó que a partir del miércoles 8 de abril se restringirá aún más el transporte, con excepción al destinado a carga de alimentos y gasolina, entre otros. Además se prohíbe la venta y consumo de bebidas alcohólicas en espacios públicos.

“Tendremos una Semana Santa sin playa”, sostuvo el mandatario. “Tendremos una Semana Santa en abstinencia”.

Giammattei informó a su vez que a partir del domingo iniciará la entrega de alimentos a personas necesitadas y mostró su satisfacción porque el Congreso aprobó varios préstamos para el pago de bonos para dos millones de familias durante tres meses con el fin que puedan subsistir ese periodo.

Más tarde, la Presidencia de Guatemala anunció el aumento de casos positivos a 59 y dos personas fallecidas. De esos 59 pacientes, 15 ya se habrían recuperado.

En El Salvador, mientas tanto, el presidente Nayib Bukele informó vía Twitter que dos personas se han recuperado de COVID-19 _un hombre de 46 años proveniente de España y otro de 37 años procedente de Italia.

“Ambos ya no tienen ningún síntoma y luego de estar positivos sus pruebas son negativas”, aseguró.

Según el informe oficial del ministerio de Salud, El Salvador registra 56 casos confirmados, tres fallecidos y dos recuperados. De todos los casos, 50 personas infectadas llegaron a El Salvador después de visitar países con presencia del coronavirus y fueron enviadas a Centros de Contención para que cumplieran una cuarentena de 30 días, de acuerdo con las autoridades.

Bukele llamó a la población a cumplir la cuarentena domiciliar obligatoria y advirtió que se abstenga de visitar playas, ríos y montañas para evitar la propagación del COVID-19.

“Las playas ríos, lagos, montañas, pueblo y otros lugares de paseo están cerrados al turismo interno y externo”, detalló el presidente a través de Twitter. “Quien sea visto en estos lugares y que no sea rediente de los mismo con motivo válido para estar fuera de casa, será enviado a un centro de cuarentena”.

En el sur del continente, Colombia intentaba socorrer a más de 2.500 de sus ciudadanos que permanecen varados en diferentes partes del mundo debido a la pandemia, al tiempo en que unos 500 bolivianos lograron ingresar a su país el sábado después de permanecer varios días en la frontera con Chile.

La canciller colombiana Claudia Blum informó que está en contacto con embajadas y consulados en el extranjero para proveer albergues y alimentos a los varados de su país. Aseguró que gracias a esas gestiones en las últimas horas han podido desembarcar grupos de colombianos en ciudades como Lisboa y San Diego.

En Bolivia, el ministro de Defensa Luis Fernando López informó que se acondicionaron carpas para acoger a los centenares de bolivianos procedentes de Chile y colocarlos en cuarentena. El gobernó había impedido el ingreso de los repatriados desde que cerró fronteras hace dos semanas.

El Ministerio de Salud boliviano elevó a 139 los enfermos con COVID-19 y a diez los fallecidos, entre ellos una beba de 5 meses con problemas cardiacos. En Santa Cruz, en el oriente, las autoridades desplegaron el sábado un gigante operativo para desinfectar esa ciudad que es el epicentro de la epidemia.

La cancillería chilena, por su parte, informó que entre el 18 de marzo y el primero de abril se repatriaron a más de 30.000 chilenos, así como a 10.000 extranjeros residentes en el país sudamericano. Hay chilenos que aún esperan retornar desde India, Cuba o Venezuela y se está trabajando para poder traerlos de vuelta, según el canciller Teodoro Ribera.

Previamente, el presidente Sebastián Piñera tuvo que salir a disculparse en las redes sociales luego que el día anterior se tomara una foto en la famosa Plaza Italia, rebautizada popularmente como la “Plaza de la dignidad” por ser epicentro de las multitudinarias protestas sociales que estallaron en octubre y que pararon debido a la pandemia.

La plaza se encuentra dentro de los seis barrios o comunas de Santiago bajo cuarentena total.

“Me bajé un par de minutos a saludar a un grupo de Carabineros y Militares que ayudaban a dirigir el tránsito, me saqué una foto y continué mi camino. Lamento si esta acción pudo malinterpretarse”, afirmó Piñera en Twitter ante las numerosas críticas que recibió en las redes.

Chile tenía hasta el sábado 4.161 casos del virus, 424 más que la víspera, y 22 fallecidos.

En Argentina, se registraba menor afluencia el sábado en los bancos luego que el día anterior la apertura de éstos generara grandes aglomeraciones en medio de los esfuerzos de las autoridades por contener los contagios mediante una cuarentena obligatoria. Este país tenía 1.353 casos positivos y 42 muertes, según el último informe de las autoridades.

En Uruguay, el número de contagiados ascendía a 386, y el sábado se registró la quinta víctima por COVID-19, una mujer de Montevideo de 53 años que padecía otras enfermedades, según informó el Ministerio de Salud.

En Paraguay se contabilizaban 96 positivos por la enfermedad, 3 fallecidos y 12 recuperados.

En Ecuador, uno de los países más golpeados por los contagios en Sudamérica, el número de positivos por coronavirus alcanzó el sábado la cifra de 3.465 y 172 fallecidos, según el más reciente parte oficial.

Colombia contabilizaba 1.406 contagiados y 32 fallecidos, así como 85 recuperados.

En tanto que Perú anunció el sábado que inició la producción de sus propios respiradores mecánicos que tendrán el nombre de “Sumay”, una palabra en quechua, la lengua de los Incas, que significa “respira”.

El país sudamericano, que sumó 73 muertos y 1.746 infectados por COVID-19, calcula que tendrá alrededor de 100 a inicios de mayo en un proyecto conjunto de la Armada, universidades y empresas privadas.

El presidente Martín Vizcarra presentó la primera unidad en el hospital naval y dijo que cuesta alrededor de 5.000 dólares, pero que en el exterior se llega a pagar hasta diez veces más.

Los respiradores mecánicos ayudarán a los pacientes graves que comienzan a presentar fallas pulmonares completas y no puede obtener oxígeno de los pulmones para sobrevivir.

Perú cuenta con 276 camas de cuidados intensivos con sus respectivos respiradores mecánicos. Además, se tiene otros 110 respiradores donados. Según el Ministerio de Salud, el país proyecta tener 500 equipos de ayuda para respirar en el corto plazo.

En toda Latinoamérica hay más de 25.500 contagiados y han muerto más de 810 personas por el coronavirus.

La pandemia ha infectado a más de un millón de personas y causado la muerte a más de 60.800 en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.

En la mayoría de la gente el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. Pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.