Tensión con Chile: un ministro de Gabriel Boric calificó de “impertinente” a Alberto Fernández

Los presidentes de Chile, Gabriel Boric, y la Argentina, Alberto Fernández
Los presidentes de Chile, Gabriel Boric, y la Argentina, Alberto Fernández

Tras el entredicho con Ecuador, por la fuga de una exministra de la embajada argentina en Quito, el gobierno de Alberto Fernández sumó otro punto de fricción en la región, esta vez con Chile. El ministro de Justicia de la administración de Gabriel Boric, Luis Cordero Vega, calificó de “impertinente” una declaración del presidente argentino, en la que acusó al Poder Judicial chileno de “perseguir opositores”. “Impertinente e impropios”, respondió el ministro trasandino, al desestimar las afirmaciones del mandatario.

En una entrevista con la televisión chilena, Cordero Vega manifestó su rechazo a las definiciones de Alberto Fernández, quien acusó a la justicia chilena de ponerse “al servicio de quienes persiguen opositores” , en relación a la extensión del caso contra el ex candidato presidencial, Marco Enríquez Ominami. Enriquez Ominami es cercano al oficialismo argentino. El martes, Cristina Kirchner y Ominami compartieron un panel en el III Foro por los Derechos Humanos.

“Uno debe ser respetuoso de las instituciones nacionales”, dijo Cordero Vega en diálogo con Tele 13 Radio, y siguió: “Para mí, sería igualmente incorrecto pronunciarme sobre la controversia que el presidente Fernández tiene con la Corte Suprema de su país” .

El ministro de Justicia de Chile, Luis Cordero
El ministro de Justicia de Chile, Luis Cordero - Créditos: @Twitter Ministerio de Justicia de Chile

En este sentido, el ministro Cordero Vega enfatizó: “Esto es especialmente delicado, en el caso en que un mandatario en ejercicio emite opiniones sobre otro poder del Estado”.

“Nosotros tenemos un Poder Judicial independiente, una autonomía garantizada del Ministerio Público y un sistema institucional sobre el cual podemos tener comentarios o críticas”, siguió el ministro de Justicia de Boric.

Frente a las apreciaciones del presidente argentino, Cordero Vega apuntó: “Es un hecho público y notorio lo que sucede con las extensiones, sobre todo, de los juicios orales, pero una cosa muy distinta es transformar eso en un problema de debido proceso y garantías, sin perjuicio de que me parecen completamente impertinentes e impropias esas declaraciones”.

Por último, el ministro de Boric definió que la opinión de Fernández “descansa sobre un desconocimiento total de las instituciones del derecho nacional”. “Por eso me parecería que son impropias. Igualmente me parecería impropio que yo me involucrara en una opinión sobre la disputa que el Presidente tiene con la Corte Suprema en la Argentina”, asestó.

El antecedente del Grupo de Puebla

Las diferencias entre los gobiernos de Chile y la Argentina ya se habían reflejado en febrero, cuando Alberto Fernández suscribió una carta del Grupo de Puebla, integrado por expresidentes y líderes progresistas, con fuertes críticas a la justicia de Chile.

“Yo respeto las instituciones, espero lo mismo de mis colegas”, fue en ese momento la respuesta de Boric, que había elegido a la Argentina como destino de su primer viaje al exterior como presidente.

Incluso, la canciller trasandina, Antonia Urrejola, luego de hablar con el ministro Cordero, transmitió su malestar al embajador argentino, Rafael Bielsa. “Nos parece que las declaraciones de esa carta son absolutamente improcedentes. El Gobierno no solo respeta, sino que protege la autonomía del Poder Judicial y del Ministerio Público”, dijo entonces la funcionaria.

La carta del Grupo de Puebla denunciaba que “una justicia dilatada es una justicia denegada”, al transmitir su reclamo por una investigación sobre financiamiento ilegal de la política, que afectaba a la compañía minera SQM y a Enríquez-Ominami, líder del Partido Progresista local, amigo del presidente Fernández y uno de los referentes del Grupo de Puebla.

El texto del Grupo de Puebla encuadraba la investigación contra el dirigente chileno como un “caso de lafware” y atribuía su avance al hostigamiento de fiscales vinculados con el expresidente Sebastíán Piñera.

Por otra parte, en enero pasado, el embajador Bielsa fue convocado por la Cancillería chilena, luego de que criticara la decisión del gobierno de Boric de cancelar un proyecto portuario y minero en la zona de Coquimbo.

El entredicho con Ecuador

El Presidente Alberto Fernández recibió a las y los miembros del Grupo de Puebla que participarán del III Foro Mundial de Derechos Humanos
El Presidente Alberto Fernández recibió a las y los miembros del Grupo de Puebla que participarán del III Foro Mundial de Derechos Humanos - Créditos: @Télam

En una misiva publicada esta semana, Fernández extendió palabras al presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, quien se mostró disconforme con el arribo del exmandatario Rafael Correa a Buenos Aires para participar de un Foro de Derechos Humanos. Así, se sumo un incidente más al vínculo, ya conflictuado desde la fuga de la exministra condenada María de los Ángeles Duarte desde la Embajada en Quito hacia Caracas.

“Presidente @LassoGuillermo, reciba estas palabras con el sincero afecto de siempre. Haga el esfuerzo de no mezclar este incidente producto de la impericia de oficiales del Estado ecuatoriano con el amor que a nuestros pueblos vincula”, escribió el Presidente en la carta a su par ecuatoriano, minutos después de haber compartido una actividad con el ex presidente Correa y otros ex mandatarios en la Casa Rosada.

En este contexto, Fernández le recriminó a Lasso haber declarado a Fuks persona no grata. “Sabe usted el respeto que le dispenso. Sabe también que quiero que la institucionalidad ecuatoriana se preserve. Pero quiero que sepa también que a todos debe lastimarnos que en su Patria, como en la mía, como en Brasil o como en Chile la Justicia se haya puesto al servicio de quienes persiguen opositores”, evaluó el Presidente.

Así, Fernández apuntó a defender a su vice, y otros políticos acusados por la Justicia, entre ellos, Marco Enriquez Ominami, ahora enjuiciado por una causa de corrupción en Chile.