Coronavirus: Surcorea cierra bares y Alemania registra casos

ROMA (AP) — La capital de Corea del Sur cerró el sábado más de 2.100 bares y otros centros nocturnos debido a un rebrote de infecciones de coronavirus, Alemania procuraba contener nuevos casos en mataderos y en Italia las autoridades estaban preocupadas de un posible exceso de amistad entre la gente en el primer fin de semana con menos restricciones en el país.

Los nuevos brotes y los temores de una segunda oleada de contagios pusieron de relieve el dilema que enfrentan las autoridades en su intento por reabrir sus economías.

Estados Unidos y otros países muy afectados por la pandemia tienen problemas para flexibilizar las restricciones a los negocios y la actividad pública sin causar un resurgimiento del virus.

En Nueva York, donde la pandemia se ha cobrado el mayor número de víctimas fatales, el gobernador Andrew Cuomo dijo que tres menores fallecieron de una posible complicación causada por el coronavirus que implicó inflamación de vasos sanguíneos y problemas cardiacos.

Por lo menos a 73 menores en el estado les han diagnosticado síntomas similares a la enfermedad de Kawasaki, una rara condición inflamatoria, y síndrome de choque tóxico. Sin embargo, no hay pruebas de que el misterioso síndrome sea causado por el virus.

Tres miembros del equipo de respuesta de la Casa Blanca al coronavirus, entre ellos el doctor Anthony Fauci, se han puesto en cuarentena porque estuvieron en contacto con una persona a la que le detectaron COVID-19, otro crudo recordatorio de que ni siquiera uno de los inmuebles más seguros de Estados Unidos es invulnerable a los contagios.

En Bielorrusia, que no ha parado actividades a pesar del aumento de las infecciones, decenas de miles salieron a las calles con motivo del Día de la Victoria por la derrota de la Alemania Nazi en 1945. El presidente autoritario Alexander Lukashenko minimiza al virus y describe las preocupaciones como “psicosis”.

Rusia, en contraste, no efectuó su gran desfile militar como es tradicional por esta histórica fecha en la Plaza Roja de Moscú.

Estaba previsto que la conmemoración para este año fuera espectacular porque se trataba del 75 aniversario, aunque el presidente Vladimir Putin colocó flores en la tumba del soldado desconocido y tuvo lugar una exhibición del poderío militar limitado al vuelo de 75 aviones y helicópteros de guerra.

En el mundo, los casos confirmados ascienden a cuatro millones incluidas 279.000 muertes, de ellas 78.000 en Estados Unidos, según la cuenta de la Universidad Johns Hopkins. España, Francia, Italia y Gran Bretaña han registrado entre 26.00 y 32.000 muertes cada país.

Alemania y Corea del Sur han efectuado pruebas a gran escala y dado seguimiento a contactos, medidas que les han granjeado elogios por evitar las numerosas muertes que han rebasado a otros países. Pero incluso en ambas naciones, las autoridades han tenido problemas para encontrar un equilibrio entre salvar vidas y salvar puestos de trabajo.

Seúl cerró centros nocturnos, bares y discotecas después de que decenas de infecciones fueran atribuidas a personas que salieron el pasado fin de semana cuando el país redujo las medidas de distanciamiento social. Muchos de las infecciones estuvieron relacionadas con un hombre de 29 años que visitó tres centros nocturnos antes de que le detectaran el contagio.

El presidente surcoreano Moon Jae-in pidió a la ciudadanía no bajar la guardia aunque señaló que no hay motivo para entrar en pánico ante las preocupaciones de un posible rebrote en el país.

El alcalde Park Won-soon dijo que los trabajadores de salud intentan contactar a unas 1.940 personas que estuvieron en los tres centros nocturnos y otros lugares cercanos. El alcalde dijo que los avances logrados contra el coronavirus están amenazados ahora “debido a un pequeño grupo de personas descuidadas”.

Alemania registró brotes en tres mataderos en lo que se considera una prueba a la estrategia del país para enfrentar un resurgimiento a medida que reduce sus restricciones. En un matadero, en Coesfeld, 180 trabajadores dieron positivo.

Los negocios en Estados Unidos continúan enfrentando dificultades a medida que más empleadores concluyen indispuestamente que sus trabajadores despedidos podrían no regresar a laborar en fecha próxima. Las autoridades de salud están pendientes de una segunda oleada de infecciones, alrededor de dos semanas después de que los estados comenzaran a reabrir gradualmente. Georgia encabeza la reanudación de actividades.

Algunos centros comerciales abrieron en Georgia y Texas, mientras que restaurantes, estéticas y otros negocios en Nevada reanudaron actividades en forma restringida el sábado y permitieron otra vez el ingreso de clientes después de una parálisis de casi dos meses de parálisis.

Pakistán cedió a la presión económica y permitió la reapertura de algunos negocios a pesar de un incremento de los casos. Permitió la reapertura de fábricas, obras y algunos negocios, al tiempo que reportó 1.637 nuevos casos y 24 decesos. El dato de infecciones se acercó a su máximo diario, alcanzado el jueves con 1.764, y elevó el total del país a 27.474.

El primer ministro, Imran Khan, explicó que su gobierno levantaba la cuarentena porque no puede mantener a los millones de familias que dependen de jornales para vivir. El gobierno advirtió que reimpondrá los controles si la población no cumple las pautas de distancia social.

China, donde comenzó la pandemia en diciembre, anunció sus planes para reabrir más escuelas en la capital, Beijing.

Más de 84.200 estudiantes de primer año de secundaria y 13.200 maestros regresarán a las aulas el lunes, anunciaron las autoridades. Cerca de 50.000 alumnos de secundaria volvieron a dar clase el 27 de abril.

China fue la primera economía del mundo en paralizarse por el virus, y la primera en reactivarse luego de que el gobernante Partido Comunista declaró en marzo que el brote estaba bajo. Los controles, incluyendo los que chequean la temperatura, siguen vigentes en complejos de departamentos y otros edificios públicos de la capital.

En Brasil, la quinta ciudad más grande del país, Fortaleza, inició una cuarentena el viernes por el incremento de las infecciones, mientras el presidente, Jair Bolsonaro, pidió al Supremo Tribunal que ordene a los estados que levanten las restricciones a negocios.

Fortaleza, una ciudad de 2,7 millones de habitantes, registró 727 muertes por la pandemia y las autoridades esperan 4.000 hasta finales de mayo. Brasil tiene más de 140.000 casos confirmados y 9.600 fallecidos, según Johns Hopkins.

___

Gera informó desde Varsovia, Polonia, y Forliti desde Minneapolis. Los periodistas de The Associated Press en todo el mundo contribuyeron a este despacho.