Coronavirus: la Legislatura porteña extendió la emergencia sanitaria hasta el 15 de junio

En la Legislatura, hubo una sesión especial para tratar proyectos vinculados al avance del nuevo coronavirus

Para atender a la situación social y económica provocada por la pandemia del nuevo coronavirus, la Legislatura porteña se reunió esta mañana en el Salón Dorado para realizar una sesión especial en la que aprobaron, entre otras medidas, extender la "emergencia sanitaria" en la Ciudad hasta el 15 de junio. Con esa ampliación, buscan atender y adoptar las medidas necesarias para prevenir y reducir el riesgo de contagio de la enfermedad.

Es por ello que en esa sesión inédita, dado que se realizó fuera del recinto, los diputados autorizaron una toma de deuda millonaria y establecieron una serie de sanciones económicas para quienes no cumplan con el aislamiento social obligatorio, entre otras cuestiones.

En ese sentido, ratificaron un decreto del Gobierno de la Ciudad que estableció multas que oscilan entre 500 y 3700 unidades fijas -es decir, entre 10.700 y 79.180 pesos- a quienes no cumplan las normas relacionadas con la prevención de las enfermedades transmisibles o no procedan a la desinfección y/o destrucción de agentes transmisores; a quienes exhiban o vendan mercaderías o servicios a precios superiores a los establecidos por las autoridades; a los conductores de vehículos o motovehículos que no cuenten con el permiso para circular.

Al respecto de esta medida, el legislador del Frente de Todos (FdT) Santiago Roberto consideró: "Hay que buscar una opción que tenga en cuenta la magnitud de la infracción, pero principalmente tratemos de educar y persuadir para que la única respuesta del Estado no sea solo castigar".

Deuda

Por otro lado, los diputados le dieron el visto bueno a otra normativa que autoriza que el Ejecutivo de la Ciudad pueda contraer empréstitos con organismos multilaterales de crédito, bancos de desarrollo e instituciones financieras por un monto máximo de hasta 150 millones de dólares o su equivalente en pesos; con un plazo de amortización de un año.

No obstante, cabe destacar que el gobierno local viene realizando un proceso de reducción de la deuda en dólares, es decir que canjeó sus bonos en dólares por pesos. De hecho, en 2015 la composición de la deuda era un 90% en dólares y un 10% en pesos; en 2017 esa conversión fue de un 50% y 50%, pero tras la devaluación ese "mix de monedas" quedó en un 60% en dólares y 40% en pesos que se mantiene hasta la actualidad.

Es así que desde el Gobierno de la Ciudad señalaron a LA NACION que esta normativa es una medida excepcional tomada en el marco de la crisis sanitaria provocada por el Covid-19 y que pretende "asegurar el financiamiento necesario para fortalecer el sistema sanitario de la Ciudad, así como también al resto de las áreas críticas que día a día participan en la lucha contra esta pandemia".

El presidente de la Comisión de Presupuesto y legislador de Vamos Juntos (VJ), Claudio Romero, explicó que "hay dos tipos de endeudamientos: uno es en dólares y otro en pesos. El que es en dólares es con organismos multilaterales" e indicó que "nadie hoy garantiza darte un monto determinado, con la situación de emergencia este monto de hasta 150 millones se puede hacer en las dos monedas".

"Esto es algo que le pasó a todos. La Ciudad no es la Nación que tiene la posibilidad de emitir, pero nosotros para resolver este gasto extra que vamos a tener, nosotros tenemos que recurrir a esto", precisó y recordó que "el objetivo, es como viene siendo en los últimos años, colocar la mayor parte de esta deuda en pesos, pero dadas las condiciones del mercado financiero local, es muy importante dotar al Poder Ejecutivo de la flexibilidad suficiente para que pueda obtener los recursos en la moneda que están disponibles".

El radical Juan Francisco Nosiglia (UCR-Evolución) detalló: "Por la caída de la actividad económica y entonces de la recaudación, sumado a la injustificable discusión con Nación por la coparticipación aún sin resolución, creemos que corresponde dar las herramientas para permitirle al gobierno porteño financiar el gasto y atravesar esta crisis de la mejor forma".

Y concluyó que "la responsabilidad de la política es impulsar y exigir que todos los niveles del Estado tomen las mejores decisiones para controlar el avance del virus y amortiguar el impacto económico sobre el pueblo".

Mientras que el diputado del GEN Sergio Abrevaya se refirió a la dramática situación que atraviesan las pequeñas y medianas industrias y los cuentapropistas. "La pymes, las mayores contribuyente en el país y en la ciudad y la que más trabajo dan, al igual que el cuentapropista, es la que más sufren los costos de la cuarentena en un contexto de recesión", remarcó.

E insistió: "Necesitamos cubrir el déficit con fondos que sirvan para el desarrollo y para el sistema de salud y el educativo. Como los bancos siguen sin colaborar, el GCBA debe usar el Banco Ciudad para que cualquiera acceda a crédito y pueda salir de esta crisis".

Bono

Otra de las iniciativas que debatió y aprobó la Legislatura fue la del bono a proveedores, el cual ya había sido colocado en el mercado por 9000 millones de pesos; pero debido a la recesión por el Covid-19, el Gobierno pidió incrementar el mismo a 18.000 millones para garantizar la cadena de pagos.

"Si bien la Ciudad es una de las jurisdicciones que mejor preparada está a nivel recursos, la baja de recaudación se va a notar en todos los distritos. Por eso, estas medidas tratan de mitigar el impacto en las cuentas públicas", detalló la oficialista Lucía Romano (VJ) y sentenció que "colocar deuda y ampliar el bono a proveedores, extendiendo el monto y la fecha, son medidas preventivas para paliar las dificultades que esta situación atípica genera".

Finalmente, la Legislatura aprobó una serie de cuestiones que le permitirá funcionar a la distancia -debido a que las reuniones de comisión de vienen desarrollando a través de teleconferencias-, los diputados podrán presentar sus proyectos de manera virtual y garantizar que se puedan realizar las sesiones en los marcos correspondientes de seguridad e higiene para reducir el riesgo de contagio.