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Coronavirus: ¿cómo es el funcionamiento virtual de los parlamentos en el mundo?

La pandemia de coronavirus ha tenido un impacto significativo en los parlamentos de todo el mundo. Con solo uno de cada diez funcionando normalmente a finales de abril, las cámaras tuvieron que encontrar urgentemente nuevas formas de funcionar, a pesar de los desafíos del trabajo remoto, el distanciamiento social y el riesgo evidente para la salud de sus miembros. España, Brasil, Noruega y Finlandia son algunos de los países que modificaron rápidamente sus leyes para permitir sesiones en línea.

En otros casos, ayudó una interpretación más flexible de las leyes y los procedimientos, como ha sucedido en Estonia. La Cámara de los Comunes del Reino Unido aprobó sesiones híbridas y el Parlamento de Nueva Zelanda creó un comité especial que se reunió virtualmente para examinar al gobierno.

Según el estudio Virtual Members: Parliaments During the Pandemic de Andy Williamson, líder en innovación democrática y participación cívica, 40% de los parlamentos celebró reuniones de comisiones utilizando herramientas digitales a raíz de la pandemia. Muchos menos lograron introducir una capacidad remota en sus sesiones plenarias y solo alrededor del 10% lo había hecho tres meses después de que comenzara la emergencia de Covid-19.

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Pero incluso en un modelo híbrido, como el del Reino Unido, Canadá o Australia, donde parte de una sesión plenaria se realiza en la cámara, los parlamentos han estado limitando severamente el número de personal y miembros presentes, y otros asisten a través de enlaces en línea.

El Parlamento español tuvo una ventaja inicial con respecto a la digitalización. La Cámara de Diputados de España ya había desarrollado una aplicación que permitía a los miembros votar cuando estaban enfermos o con una licencia por maternidad. Se había utilizado relativamente poco durante los siete años anteriores, pero se extendió a todos los miembros una vez que golpeó la pandemia. Las reuniones se realizaron mediante Zoom, pero las votaciones se realizaron de forma segura a través de la aplicación. A partir de finales de junio, sin embargo, los legisladores retomaron gradualmente la modalidad presencial, según informó El País.

Brasil siguió el ejemplo de España. Para asegurar la continuidad del trabajo legislativo durante la crisis sanitaria, cuando el distanciamiento social se convirtió en una gran preocupación, el 17 de marzo, la Cámara de Diputados de Brasil aprobó la Resolución 11/2020 sobre sesiones plenarias virtuales.

Como en España, el camino hacia un parlamento virtual se había establecido varios meses antes, cuando los parlamentarios brasileños aprobaron la Resolución 12/2019 sobre el proceso legislativo digital en la Cámara de Diputados de Brasil. Combinadas, las resoluciones sentaron las bases perfectas para desarrollar una amplia solución digital para soportar el trabajo remoto de 513 legisladores.

Así, el 25 de marzo se realizó la primera sesión plenaria virtual. Dos días después, los miembros del parlamento pudieron acceder a las sesiones utilizando la aplicación Infoleg en sus dispositivos móviles.

Chile también fue de los primeros países en cambiar a una modalidad a distancia. El 23 de marzo, el Senado modificó su reglamento para permitir sesiones virtuales y votación remota y desarrolló un protocolo para reuniones digitales. El "Pupitre Electrónico" de la Cámara de Diputados fue habilitado para ser utilizado a distancia mediante una VPN a través de una aplicación móvil o en línea, según informó ParlAmericas.

Bajo esta modalidad, se aprobaron una serie de medidas como aquellas que conforman El Plan Económico de Emergencia por Coronavirus, entre las que se destaca la ley 21.225, que contempló la creación del Bono Covid-19, destinado a las familias de más bajos recursos.

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"Es preciso fortalecer el rol de los Poderes Legislativos para que puedan adaptarse a esta nueva realidad que nos presenta la pandemia y continuar ejerciendo sus funciones de representación, legislación y control político", precisaron en abril en un informe conjunto la Fundación Directorio Legislativo y ParlAmericas.

Hasta que se declaró la pandemia "prácticamente no se registraban experiencias de implementación de mecanismos de trabajo a distancia aplicados al debate legislativo, y menos aún, a la instancia de votación de leyes".

También el 24 de marzo, con una resolución de 17 artículos frente a la crisis derivada de la pandemia, Ecuador celebró la primera sesión virtual del Pleno de la Asamblea, reportó El Comercio. El escritorio digital de la Asamblea Nacional "Curul Electrónica" está en una intranet que puede ser accedida a distancia con un inicio de sesión personal y utilizando un protocolo de escritorio remoto.

En Paraguay las sesiones virtuales comenzaron el 14 de abril en la Cámara de Senadores, tras la confirmación de un caso positivo, con presencia del presidente desde la sala de sesiones y la asistencia remota de los demás miembros, vía comunicación telemática que debía "garantizar la interactividad, la interlocución e integridad de las decisiones de todos los asistentes a la misma, a través de la plataforma de comunicación autorizada y disponible para el efecto", según el reglamento establecido.

La Cámara de Diputados durante una sesión virtual por la pandemia de coronavirus

Otros países del continente han hecho experimentos más acotados. En Panamá, por ejemplo, como una medida para mermar los contagios por el coronavirus, el pleno de la Asamblea Nacional sesionó la primera quincena de julio virtualmente luego de que la directiva aprobara una resolución en ese sentido.

El 22 de abril, la Cámara de los Comunes del Reino Unido celebró su primera sesión virtual, aunque con unos pocos miembros presentes, en sus 700 años de historia. Se plantearon algunas preocupaciones de seguridad sobre el uso de Zoom, pero la Comisión de la Cámara de los Comunes dijo que el Centro Nacional de Seguridad Cibernética les había informado que la aplicación era apropiada "si la instalación y el uso del servicio se administraban con cuidado". Posteriormente, los parlamentarios votaron a favor de implementar la tecnología de votación remota, a pesar de los problemas relacionados con la verificación y la seguridad.

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Sin embargo, a partir de junio, los diputados regresaron a la Cámara de los Comunes para votar sobre la suspensión de los procedimientos híbridos y lo servicios públicos comenzaron gradualmente a reanudar los procedimientos presenciales.

Las dificultades que rodean al funcionamiento de los parlamentos en tiempos de pandemia no esquivan a la Argentina, donde anoche, en el recinto de la Cámara de Diputados, el oficialismo y el resto de los bloques parlamentarios, con la excepción de los diputados de Juntos por el Cambio, dieron por aprobada en una sesión virtual la prórroga, por otros 30 días, del protocolo que habilita la continuidad del sistema telemático del cuerpo, sin límites en los proyectos a discutir.