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Coronavirus en la Argentina. Más casos positivos por el baby shower clandestino de Necochea

La reunión del comité de emergencia el pasado viernes por la proliferación de casos de coronavirus en pocos días

NECOCHEA.- Ni el temporal de anoche, con ráfagas de hasta 100 km/h y caída de decenas de árboles, sacó del foco de máxima preocupación local a la cadena de contagios que el martes pasado comenzó con una familia y luego se multiplicó en un concurrido baby shower que tuvo más de 30 asistentes. El último reporte oficial confirmó otros cuatro casos positivos, todos participantes de ese agasajo a unos futuros padres. Así la lista se extiende a 22 casos de coronavirus en apenas cuatro días. Todavía se esperan resultados por otros 60 tests.

Pero el mayor riesgo es hasta dónde y a quiénes esos infectados han llevado el virus con el que habrían tomado contacto el pasado sábado 23. En las últimas horas ganó en inquietud la comunidad portuaria, ya que uno de los infectados brinda servicios para un prestador en la terminal de Quequén y en estos días estuvo con decenas de trabajadores del lugar. "Y sin los cuidados sanitarios", advirtió una fuente municipal, sobre una costumbre común entre esos y otros trabajadores: compartir un mismo mate.

El mapa epidemiológico, que identifica el punto de inicio y las ramificaciones derivadas de los vínculos de cada contagiado o sospechoso de serlo, se amplía jornada tras jornada. "Exige mucho tiempo y personal para interrogar y saber qué hizo y con quién estuvo cada uno", explicó a LA NACION, la secretaria de Salud municipal, Ruth Kalle. Por eso, mucho más en las últimas horas, las autoridades recomiendan el aislamiento por 14 días de quienes se sientan en riesgo. A la fecha están registradas unas 300 personas en esa condición.

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Necochea tenía solo tres casos de coronavirus para el pasado 26 de marzo. Todos eran vecinos que habían llegado desde el exterior. Dos meses pasaron hasta que se detectó el siguiente caso, confirmado el pasado miércoles: una mujer de 48 años. Ella contagió a su madre y sus tres hijos y solo a una de las siete ancianas alojadas en un geriátrico en el que trabaja.

El intendente local, Arturo Rojas, dio marcha atrás con las medidas de flexibilización de la cuarentena que venía implementando durante las últimas semanas

A su vez, ella se habría contagiado de quien se cree el nexo epidemiológico de esta cadena: un vecino que, según el municipio, estuvo en Buenos Aires para atenderse por una afección cardíaca. Se sabe que pasó por el Sanatorio Güemes, donde acaban de confirmar 53 casos de Covid-19. A él le dio positivo el test y es un hecho que no cumplió la cuarentena. Ahora está internado en el Hospital Municipal porque presenta problemas respiratorios.

Dos de los hijos de aquella mujer asistieron a un baby shower que se realizó hace ocho días en un ambiente muy pequeño, pero donde coincidieron 31 personas, según la lista que tenían ayer en la Secretaría de Salud local. El doble de la original, que había quedado limitada por los datos falsos que aportaban los participantes por temor a denuncias penales por violar el aislamiento.

A la fecha ya se confirmaron 14 contagiados entre los protagonistas de esa reunión. Entre ellos la pareja de futuros padres agasajados. La joven embarazada, que promedia el período de gestación, quedó internada, sin síntomas, para su seguimiento. Sería solo por unos días.

Se espera para esta noche un nuevo informe del Servicio Integran de Información Sanitaria (SISA) sobre otras 20 muestras enviadas desde Necochea. El de anoche, sobre la misma cantidad, solo hubo cuatro positivos, todos del baby shower. El mejor dato fue que dieron negativos todos los alojados en otro geriátrico donde una enfermera también había dado positivo, pero sin ningún vínculo con el grupo anterior.

También quedaron prohibidos por completo los paseos recreativos y la práctica de deportes al aire libre

La pareja de la joven embarazada, también contagiado, es quien trabaja en el puerto vecino. Autoridades municipales se comunicaron con la empresa para advertirle que será necesario hisopar a sus compañeros de tareas. En los descansos, según reconoció el muchacho, comparten rondas de mate. Se cree que en el baby shower la expansión del virus fue tan amplia porque también compartieron misma bombilla y vasos.

En el caso que dentro de ese grupo surgiera algún nuevo positivo la red de riesgo se expandiría y debería poner bajo la mira a más de un centenar de operarios del predio del puerto que concentra los servicios de logística.

Estos descuidos, que confirman la desatención a las recomendaciones de cuidado ya bien conocidas por todos, más la cantidad de casos que aparecieron en pocos días, llevaron al intendente local, Arturo Rojas, a retroceder en las medidas de flexibilización de la cuarentena que venía implementando durante las últimas semanas. El jueves el municipio clausuró una parrilla con 23 comensales y el viernes se desactivó una fiesta de cumpleaños familiar.

Por eso, desde el primer minuto de ayer, volvieron a cerrar los comercios que no son esenciales, con lo que se regresó al escenario del inicio de la cuarentena. "Ayuda económica ya", salieron a pedir desde la organización Comerciantes Unidos de Necochea y Quequén (Cuneq) por la imposibilidad de seguir en actividad. "La irresponsabilidad de unos pocos es la pérdida de nuestras fuentes de trabajo", acusan.

También quedaron prohibidos por completo los paseos recreativos y la práctica de deportes al aire libre. El jefe comunal advirtió que estas restricciones son "por tiempo indeterminado" hasta tanto entiendan que la situación sanitaria pudo ser controlada.

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