Continúa la desesperada búsqueda de una argentina que iba a denunciar a su pareja en Uruguay

Andrea Panini, de 43 años, despareció el último jueves
Andrea Panini, de 43 años, despareció el último jueves

Andrea Panini , una argentina de 43 años que vive en Uruguay, desapareció este jueves pasado cuando iba entregar un escrito por violencia de género contra su expareja a un juzgado en el Remanso de Neptunia, donde vive.

Para “Pandi” -una instructora de yoga “muy positiva y sana”, como la categorizan sus familiares y amigos-, el jueves 10 de junio comenzó como un día normal. Durante la mañana, se comunicó con sus amigas, con quienes estaba en contacto a diario, y saludó a una de ellas por su cumpleaños. Le dejó el hijo a un vecino sobre el mediodía para ir al juzgado a dejar una documentación y avisó que volvería a las 15.30, y desde ahí se le perdió el rastro”, informa su familia.

“En el último tiempo estaba pasando un momento difícil por un largo litigio con su expareja, padre de su hijo, quien tiene una tobillera electrónica a pedido de la Justicia que le prohibía acercarse a ella”, precisaron fuentes de su entorno.

Movilización y rastrillaje, una desesperada búsqueda para dar con el paradero de Andrea Panini
Movilización y rastrillaje, una desesperada búsqueda para dar con el paradero de Andrea Panini


Movilización y rastrillaje, una desesperada búsqueda para dar con el paradero de Andrea Panini

Andrea Panini nunca llegó al juzgado. Así lo aseguró su hermana, Paula, quien encabeza la búsqueda en coordinación con amigos y familiares. Según la reeconstrucción que han podio hacer, la mujer salió de su casa cerca de las 11.30, y llegó a pasar por un Western Union a las 14, donde cobró los honorarios de unas clases que había dado a estudiantes fuera de Uruguay.

“Eso es lo único que sabemos”, dijo, y precisó que cuando los vecinos que cuidaban al hijo fueron los primeros en preguntar por Andrea, cuando nunca regresó. “A las 22 [del jueves], una de sus amigas me llamó y me contó lo que había pasado”, indicó Paula.

Desde su desaparición se ha iniciado una desesperada búsqueda para dar con su paradero. “No nos queda otra que buscarla de esta forma”, contó a LA NACION una amiga cercana a la familia, quien precisó que se ha avanzado hasta en la realización de rastrillajes por la zona donde se la vio por última vez.

Se ha convocado a movilizaciones para exigir que Andrea Panini aparezca. Su familia no tiene información precisa y, a medida que pasa el tiempo, la angustia crece. “Estamos pidiendo por favor que la policía de Uruguay acelere; tenemos muy buena voluntad nostros, pero no los elementos”, dijo la hermana.

Daniel Panini, hermano de Andrea, viajó a Uruguay para conducir las búsquedas desde allá. “La fiscal le dijo que ellos están revisando las cámaras, pero no nos dicen nada ni nos muestran a Andrea en las cámaras”, precisó su hermana, y continuó: “Tampoco nos queda claro si están haciendo rastrillajes”.

A la búsqueda se sumó Juan Carr, de Red Solidaria. “Nos está acompañando en esta desesperada búsqueda. También nos apoyan los colectivos de mujeres de Uruguay y Argentina”, precisó Paula Panini.

Sobre Andrea Panini

Andrea es argentina y vive en el Remanso de Neptunia , un balneario uruguayo del departamento de Canelones, desde hace más de siete años junto a su hijo de 11. “Es una persona luminosa, alegre, no es de hacer estas cosas. Lo único que sé es que ella iba a la fiscalía de Atlántida y nunca llegó. Algo le pasó”, dijo a LA NACION su hermana Paula, quien se enteró el jueves por la noche de la búsqueda de su hermana.

El caso de la desaparición de Andrea es llevado en conjunto por la Justicia de Uruguay y la Argentina. Hasta el momento, las redes sociales del país vecino estallaron en mensajes de búsqueda y los amigos más cercanos de Pandi comenzaron a rastrear las zonas cercanas, como la costa y los arroyos. Si bien aún no se realizó ninguna concentración en reclamo del paradero de la mujer, Paula anticipó que ya se comunicó con varios colectivos de mujeres para convocar alguna marcha u organizar algún tipo de pedido de ayuda a la brevedad.