Conmebol: año nuevo, viejas mañas en sus copas

BUENOS AIRES (AP) — Con sus dos máximas competencias continentales en marcha, el fútbol sudamericano ya incurrió en viejas mañas.

Seis clubes de Chile fueron sancionados por la Conmebol con multas económicas de 15.000 dólares cada uno por incumplir el plazo para la presentación de la lista de jugadores en la Copa Libertadores y en la Sudamericana.

Otros 15 equipos de Brasil, Paraguay y Venezuela aguardan por el dictamen del tribunal de disciplina de la entidad por la misma razón, mientras que Barcelona de Ecuador quedó eliminado en la fase preliminar de la Libertadores por inclusión indebida de un jugador.

El prestigio de la Conmebol se vio dañado en 2018 con las irregularidades que afectaron el normal desarrollo de las competencias que están bajo su ala y que tuvieron como corolario la mudanza de la final inédita de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors a Madrid.

La Conmebol no tenía debidamente registrados en su sistema las suspensiones a jugadores por acumulación de amarillas y rojas de vieja data, lo cual motivó que varios equipos cometieran la alineación indebida de futbolistas.

Algunos clubes con buenos abogados advirtieron la anomalía a tiempo, reclamaron ante el tribunal de disciplina y lograron que la Conmebol les diera por ganada la partida en los despachos de Asunción y no en la cancha.

Inédita también fue la sanción contra el técnico de River, Marcelo Gallardo, por ingresar tarde a su equipo en instancias decisivas de la Libertadores. El “Muñeco” no pudo dirigir desde la banca en los dos duelos de la final ni tampoco dar instrucciones en el vestuario.

Pero sin dudas la peor mancha para la entidad desde el escándalo de corrupción que derivó en la detención de sus máximos dirigentes por irregularidades en la venta de derechos de televisión fue la incapacidad para organizar en su propio continente la que fue catalogada como “la final del siglo”, que se terminó jugando en la capital española.

Tras los graves hechos de violencia en Buenos Aires previos a la disputa de la revancha, la Conmebol juzgó que Argentina no estaba en condiciones de albergar semejante acontecimiento, pero lejos de buscar alternativas en países vecinos se tentó con un cambio de continente.

La entidad tomó el 2019 como el inicio de una nueva era. Cambio en el formato de los torneos, con la disputa de la final a un solo partido en cancha neutral. Más millones en premios y el ingreso de Facebook como nuevo emisor, que permitirá a sus usuarios seguir varios encuentros de la Libertadores a través de la plataforma.

Pero a principios de febrero el tribunal de disciplina de Conmebol volvió a tener injerencia en un resultado. Le dio por ganado al uruguayo Defensor Sporting un partido de la fase preliminar de la Libertadores ante Barcelona por la inclusión indebida del jugador colombiano Sebastián Pérez en su lista de buena fe para la competencia pese a que el mediocampista estaba todavía inscripto en la Federación Mexicana.

No fue similar la resolución con los chilenos Antofagasta, Universidad de Chile, Palestino, Unión La Calera, Unión Española y Colo Colo por inscribir fuera de plazo las listas de los jugadores.

A la espera de sanción por idéntico motivo están Atlético Mineiro, Sao Paulo, Botafogo, Santos, Bahía, Fluminense, Corinthians y Chapecoense de Brasil; Sol de América, Independiente, Deportivo Santaní y Guaraní de Paraguay; Estudiantes de Mérida y Zulia de Venezuela.

La Conmebol sostuvo que en el caso del Barcelona se violaron estatutos de FIFA, mientras que los otros 21 equipos “presentaron errores en los pasos de envío de listas de jugadores”.

“Ante esta situación, Conmebol actuó diligentemente y de acuerdo con los procedimientos normativos remitió dichos errores al tribunal disciplinario para su estudio y consideración. Por consiguiente, mientras el tribunal disciplinario no tome una decisión al respecto, la competición continúa con normalidad”, dijo en un comunicado.