Los compositores John Williams y Ennio Morricone ganaron el Princesa de Asturias

Dos de los más importantes compositores de música de películas de toda la historia, Ennio Morricone y John Williams, ganaron el premio internacional Princesa de Asturias de las Artes 2020, un galardón otorgado todos los años por los Reyes de España en varias disciplinas.

"Las innumerables composiciones que han escrito Morricone y Williams no solo han sido un telón de fondo para acentuar atmósferas o definir personajes, sino que han traspasado la pantalla y han sabido mezclar perfectamente los fondos de la historia de la música con el sonido de su tiempo, sin olvidar su propia idiosincrasia", señaló el comunicado difundido por el jurado del premio, que por primera vez sesionó para tomar esta decisión a través de videoconferencias debido a la emergencia por el coronavirus.

En el acta suscripta por el mismo jurado se afirma que la música para el cine "ha trascendido en muchas ocasiones a las películas para las que fue creada". Y se indica que esas creaciones tienen un notable poder de comunicación y de evocación de imágenes, historias y situaciones.

Williams y Morricone comparten ese atributo desde un extraordinario lugar de privilegio. No hay nombres en la historia de la música de películas que hayan llegado tan lejos como ellos tanto en la cantidad de composiciones escritas para el cine como en el número de reconocimientos alcanzados a través de ellas.

Williams, de 88 años, ocupa el segundo lugar entre todas las figuras de la historia que sumaron la mayor cantidad de nominaciones al Oscar. Lleva acumuladas en total 52, con cinco triunfos: El violinista en el tejado (1972), Tiburón (1976), La guerra de las galaxias (1977), E. T. El extraterrestre (1983) y La lista de Schindler (1994). Tres de estos premios fueron a partir de su trabajo para el cine de Steven Spielberg, junto al cual llevó adelante sin dudas su trabajo más destacado en la pantalla grande.

Pero la trayectoria de Williams excede por mucho a su unión con un solo realizador, más allá de su estrecha, prolífica y brillante unión con Spielberg. Tal vez el fruto más importante de la carrera de Williams como músico de películas es su inspirada colección de temas de aliento épico y imponente orquestación que el público inmediatamente identifica como signo de las obras y de los personajes a los que alude. Tres de ellos sobresalen sobre el resto: la ya citada fanfarria de La guerra de las galaxias que escribió para George Lucas en 1977, el tema principal de Superman (compuesto en 1979 para la serie de películas dirigidas por Richard Donner, con Christopher Reeve) y el leit motiv de las aventuras de Indiana Jones, otro de sus aportes para el cine de Spielberg conocido en 1981.

Williams sigue en actividad como su colega Morricone, aunque éste es tres años mayor. A los 91, el gran compositor italiano ya se despidió definitivamente de los escenarios luego de una última gira. Pero continúa con su trabajo para el cine y de hecho se encuentra actualmente preparando la banda de sonido de una nueva versión de El fantasma de Canterville, con Hugh Laurie e Imelda Staunton.

La obra de Morricone se reveló por primera vez a través del spaghetti western, el primer género a través del cual quedó a la vista su talento como compositor intuitivo, capaz de usar además de los instrumentos sinfónicos (una especialidad de Williams) todo tipo de sonidos surgidos "de la calle" como más de una vez expresó. Así puede apreciarse en su aplaudido trabajo junto a Sergio Leone en la llamada Trilogía del Dólar (Por un puñado de dólares, Por unos dólares más y Lo bueno, lo malo y lo feo), protagonizada por Clint Eastwood.

Más tarde llevó su asombrosa y prolífica creatividad (lleva escritas más de 800 bandas de sonido) a todo tipo de géneros. Trabajó con todos los grandes directores italianos, se puso al servicio de destacadas producciones europeas y fue constantemente requerido más tarde por el cine de Hollywood. Después de cinco nominaciones al Oscar y una estatuilla honorífica en 2007, finalmente obtuvo el premio a la mejor música original en 2016 por su trabajo junto a Quentin Tarantino en Los 8 más odiados.

El Princesa de Asturias de las Artes para dos músicos se conecta con los orígenes del premio. Desde su instauración en 1981, cuando el ganador fue el director de orquesta español Jesús López Cobos, este reconocimiento distinguió a grandes figuras del arte y el espectáculo de todo el mundo, entre ellas José Carreras, Paco de Lucía, Vittorio Gassman, Woody Allen, Bob Dylan, Francis Ford Coppola, Peter Brook y Martin Scorsese.

Es la primera vez en la historia que este galardón se otorga a dos compositores musicales y la segunda en que el galardón resulta compartido. Algo así había ocurrido solamente en 1991, cuando el entonces Príncipe de Asturias de las Artes fue adjudicado en conjunto a los cantantes líricos Victoria de los Angeles, Teresa Berganza, Montserrat Caballé, José Carreras, Pilar Lorengar, Alfredo Kraus y Plácido Domingo.

Este año hubo 42 candidaturas al premio procedentes de 21 países. Y el de las Artes es el segundo de los ocho Premios Princesa de Asturias que se conceden este año. Anteriormente fue otorgado el de la Concordia a los trabajadores de la salud que estuvieron en la primera línea de batalla contra la pandemia de coronavirus en España.