Anuncios

¿Ciudad bilingüe?: el mail de Jorge Macri a los vecinos con una propuesta educativa que generó polémica en las redes

La propuesta se asienta en el aprendizaje online
La propuesta se asienta en el aprendizaje online - Créditos: @shutterstock

La propuesta llegó a los correos electrónicos de los porteños en los últimos días. Fue la primera iniciativa que lanzó como precandidato a jefe de gobierno de la Capital. El lanzamiento a la carrera electoral de Jorge Macri (Pro) fue con la idea de convertir a Buenos Aires en un ciudad bilingüe. Si, bilingüe. Una donde todos los habitantes sean capaces de hablar fluidamente inglés.

Visión Cero, el efectivo método sueco que logró que una capital de América Latina bajara los siniestros de tránsito

La iniciativa, que despertó avales y cuestionamientos, según explican los colaboradores del actual ministro de Gobierno porteño es más integral de lo que puede creerse y no se limita a la enseñanza de una segunda lengua a niños y adolescentes en las escuelas, algo que ya se viene impulsando en la ciudad, donde cada vez son más los colegios públicos que ofrecen la doble enseñanza. En cambio, esta propuesta busca que todos los porteños logren el dominio del idioma inglés, tanto los chicos como los adultos, que puedan certificarlo internacionalmente y que esto sea un pasaporte a conseguir mejores trabajos.

“Hicimos una encuesta para saber cuántos porteños aprobaban la idea de convertir a Buenos Aires en una ciudad bilingüe español-inglés. La respuesta fue abrumadoramente positiva. Jóvenes, adultos, personas mayores, hombres y mujeres de todos los barrios aprobaron la idea de crear una enseñanza masiva y gratuita del inglés para facilitar el acceso a esa segunda lengua. El 75% respondió que aprobaba la iniciativa. Las mujeres y las personas entre 30 y 49 años fueron los que expresaron mayor aprobación”, afirmó Macri en una publicación que hizo estos días en su cuenta de Instagram y que llegó por mail a los vecinos.

Según explican desde su equipo de campaña, el diagnóstico con el que cuentan dice que apenas el 10% de los habitantes de la ciudad podrían sostener una conversación con una persona en inglés. “El objetivo es crear las condiciones de enseñanza para lograr progresivamente que los porteños se vuelvan mayormente bilingües. Hoy solamente 10% dice poder hablar inglés con fluidez. ¿Por qué importa? Porque dominar el inglés ofrece ventajas competitivas decisivas para el trabajo y el estudio y esa ventaja hoy se encuentra concentrada en un grupo reducido de porteños que acceden en su infancia y adolescencia a una enseñanza intensiva”, indica Macri en los fundamentos de la iniciativa.

Perdí 20 kilos con la semaglutida, pero la lucha contra el sobrepeso siempre deja interrogantes

Respaldos y cuestionamientos

Antes de lanzar esta propuesta de campaña, el equipo de Macri impulsó una consulta sobre los intereses de los porteños. Así se encontraron con un gran interés a que exista un impulso a la ciudad bilingüe. “La mayoría encuentra en este segundo idioma la condición para expandir sus posibilidades de trabajo, estudio, consumos culturales y adquirir una lengua global”, justifica el precandidato. También llegaron los cuestionamientos, que quedaron registrados en los comentarios en sus redes sociales: entre ellos quienes preguntan por qué no otra lengua que no sea el inglés, incluyendo las de los pueblos originarios. Otros critican que, ante la crisis social, se impulse la enseñanza de otro idioma. “Como pasa con otros temas, las respuestas [a la consulta que impulsaron] tuvieron una fuerte influencia de las ideologías de los encuestados. Por ejemplo, el 59% de los que adhieren al kirchnerismo estuvieron en contra de una ciudad bilingüe, mientras que solamente el 19% de los que simpatizan con Juntos por el Cambio se opuso”, señala Macri en el mail.

“¿Queremos convertir a Buenos Aires en una ciudad donde gran parte de la población de todas las edades tenga habilidades de comunicación en inglés? Para lograrlo se requiere una fuerte aprobación de la opinión pública y determinación para llevarlo a cabo. Existen las tecnologías, la infraestructura y las metodologías para alcanzar ese objetivo en un plazo corto”, afirma. Desde su entorno reconocen que no hay experiencias internacionales de ciudades que se haya vuelto bilingües.

Cómo dar ese gran salto, todavía es algo que se está investigando, dicen desde el equipo de Macri. Principalmente mencionan metodologías de enseñanza virtual e inteligencia artificial, plataformas remotas, que son gratuitas en los primeros niveles y permiten certificar el nivel y la práctica del idioma con hablantes nativos, entre otras. El tiempo promedio de estudio para adquirir un nuevo idioma es de entre 600 y 750 horas de clase.

“Cuando pensamos enseñar idiomas en escuelas a veces tenemos el obstáculo de pensar en cuántos maestros capacitados necesitaremos para impartir las miles de horas de clase que comprenden un curso. Las plataformas online pueden simplificar esto, incluso las versiones con asistentes de Inteligencia Artificial pueden personalizar la enseñanza, el seguimiento. Están siempre disponible, nunca se cansan, nunca pierden la paciencia, no requiere libros. Son docentes que están en los teléfonos, en las computadoras, que traen textos y palabras, podcasts. Y lo más importante, que ofrecen certificaciones internacionales del mismo valor que la enseñanza presencial”, detalla un borrador del preproyecto que impulsa Macri.

“Aprender inglés en línea es una forma abrupta de alcanzar igualdad de oportunidades. Si alguien duda de la eficacia y crecimiento de la enseñanza de idiomas en línea debe antes conocer que se estima que en los próximos seis años el mercado mundial de autoaprendizaje de idiomas alcanzará los U$S 31.800.000.000”, se agrega en el documento.

Una cifra desconocida

En rigor, no se sabe cuántos son los porteños que son realimente bilingües. Existe un estudio, a nivel mundial que mide el nivel de inglés de los ciudadanos: EF English Proficiency Index es una clasificación de países y regiones según sus habilidades en inglés. Es una prueba adaptativa de inglés, en línea, que se aplica todos los años a más de un millón de personas en todo el mundo, que determina las habilidades de lectura y escucha. Se trata de una prueba estandarizada, con puntuación objetiva, diseñada para clasificar las habilidades lingüísticas. Los impulsores de la medición reconocen que la muestra “no es representativa”, porque no todo el mundo tiene acceso a Internet, o motivación para hacer el test, entre otras cuestiones. Y esta es una de las críticas que recibe. Sin embargo, es la única información comparada que existe a nivel global sobre el dominio del inglés y por eso es tenida en cuenta cada vez más por los especialistas.

En la última medición, en 2022, la Argentina obtuvo un desempeño clasificado como alto, con un promedio de 562 puntos, por encima de la media mundial y seis puntos mejor que el año anterior. En la última década se pasó de un conocimiento medio de inglés, a uno alto. Hoy, el país se ubica en el puesto 30 de 111 naciones evaluadas. La media global fue de 502 puntos. Los argentinos fueron los latinoamericanos que mejor hablan inglés y dedican unos 10,9 años a la formación en esa lengua.

Sin embargo, los porteños no son los argentinos que mejor dominan el inglés. Cuando se detalla por ciudad, el informe apunta que obtuvieron un puntaje de 578, por debajo de otras localidades como La Plata, donde el puntaje fue de 607 (29 puntos por encima del promedio regional); Mar del Plata, con 593; Rosario, 586 y Bahía Blanca, 583.

Según detalla el último informe internacional, en las distintas ediciones se han encontrado correlaciones entre habilidades de inglés y productividad, calidad de vida, innovación y una variedad de otros indicadores sociales y económicos de los países.