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Cientos se reúnen para gala de PEN America con Awkwafina

PEN America realizó una de las primeras reuniones literarias importantes de Nueva York en interiores desde que la pandemia comenzó el año pasado, en la que cientos de personas se reunieron el martes por la noche para la gala anual de la organización en honor a escritores, activistas comunitarios, disidentes políticos y figuras prominentes como el ejecutivo de Walt Disney Robert A. Iger.

Después de una ceremonia virtual en 2020, los asistentes se reencontraron en la vieja sede de la gala el Museo Estadounidense de Historia Natural bajo una enorme reproducción de ballena azul. PEN, una organización literaria y por los derechos humanos, requirió que todos los asistentes presentaran una prueba de vacunación y una prueba negativa a coronavirus realizada en un máximo de 72 horas previo al evento. Una vez dentro les pedían usar cubrebocas cuando no estuvieran comiendo o bebiendo en una noche que incluyó una recepción de coctel y una cena.

Las tasas de infección se mantienen altas en Nueva York en comparación con el verano, aunque están bastante por debajo de los picos previos a la vacunación del invierno pasado y marzo y abril de 2020. Otra fecha tradicional literaria, la ceremonia de los Premios Nacionales del Libro, se realizará en línea por segundo año consecutivo por el virus. Pero el presidente de PEN, el autor y dramaturgo Ayad Akhtar, calificó a la gala como una especie de deber cívico. Dijo al público que después de 18 meses de pantallas de Zoom una reunión en vivo de escritores y otros artistas, y la reapertura gradual de las oficinas de PEN, podría inspirar a otros a “seguir adelante”.

“Esto es parte de lo que sentimos que podemos y debemos hacer”, dijo.

De acuerdo con PEN, cerca de 500 personas asistieron a la gala, cientos menos que en años pasados. Pero a pesar de esto la organización recaudó más de 3 millones de dólares, anunció la directora ejecutiva de PEN Suzanne Nossel, un récord para el evento. Los asistentes incluyeron a las escritoras Min Jin Lee y Claudia Rankine y al autor Walter Isaacson, entre otros, dijo un vocero de PEN, además de varios presentadores especiales.

El actor y dramaturgo de origen puertorriqueño Lin-Manuel Miranda presentó a Iger y elogió la versión cinematográfica de Disney de su musical “Hamilton” y la disposición de la empresa para “incluir a los artistas” en beneficio de la producción y honrar sus voces. El autor y académico Henry Louis Gates Jr., galardonado con el premio PEN/Servicio a la Biblioteca Audible, fue presentado por dos viejos amigos: Jodie Foster quien fue su alumna cuando estudiaba en la Universidad de Yale, y el galardonado nigeriano con el Nobel de literatura Wole Soyinka, quien elogió sus esfuerzos para ilustrar el pasado de la gente negra en el mundo.

La actriz y rapera Awkafina fue la maestra de ceremonias en una gala PEN que fue una defensa a la libertad de expresión y una advertencia contra la diseminación de mentiras.

Iger, el “galardonado corporativo” de la noche expresó su temor ante una “polarización” y una “indiferencia general a la verdad”, amplificadas y aceleradas por la tecnología moderna. Los agasajados también incluyeron a las funcionarias de salud pública de California Mimi Khin Hall y la doctora Gail Newel, quienes recibieron el Premio PEN/Benenson a la Valentía por lo que en otro momento habría parecido obvio: servir a sus comunidades. Ambas han enfrentado amenazas y furia por parte de aquellos que negaron la gravedad e incluso la existencia del coronavirus. La salud pública siempre ha sido un reto, dijo Hall, pero durante la pandemia ella y sus colegas han enfrentado “una hostilidad sin precedentes alimentada por la desinformación y la división política”.

Pero, agregó, “cuando se presentan los desastres nuestro compromiso con la humanidad se vuelve más claro”.

Tres escritores y activistas iraníes encarcelados, Baktash Abtin, Keyvan Bajan, y Reza Khandan Mahabadi, recibieron el Premio PEN/Barbey a la Libertad de Escritura. El premio fue recibido a su nombre por la dramaturga Lynn Nottage, quien leyó una carta de estos tres disidentes en la que agradecían a PEN y expresaron su apoyo a muchos otros perseguidos dentro y fuera de Irán.

“Su premio de hecho le pertenece a todos ellos”, señalaba la carta.