Nuevos choques armados en el mayor campamento de refugiados palestinos en el Líbano

El Cairo, 7 sep (EFE).- El campamento de refugiados palestinos de Ain el Helu, en el sur del Líbano y el más grande del país, fue testigo este jueves de nuevos enfrentamientos armados entre distintas facciones palestinas tras semanas de calma después de que unos violentos choques que estallaron a finales de julio se saldaron con al menos 13 muertos.

La Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN) dijo que los choques se produjeron entre el movimiento nacionalista palestino Fatah y "grupos armados", que utilizaron "ametralladoras y dispararon proyectiles cuyos ecos están resonando en la ciudad de Sidón", cercana al campamento.

Hasta el momento, se desconoce si los enfrentamientos han dejado muertos o heridos.

Los choques se reanudaron después de que el pasado 29 de julio miembros de Fatah se enfrentaran con facciones islamistas dentro del campamento, en unos violentos choques que se alargaron hasta el 7 de agosto y que dejaron al menos 13 muertos y más de 60 heridos.

El Gobierno libanés aseguró que la situación se había calmado en Ain el Helu y que la violencia no tuvo repercusiones "en otros campamentos" de refugiados palestinos en el país mediterráneo.

La intensidad de esos choques provocó que países como Arabia Saudí, Kuwait y Emiratos Árabes Unidos pidieran a sus ciudadanos que no se acercaran a esa zona del Líbano e incluso recomendaran que abandonaran el territorio libanés.

Pero pese a que la violencia había remitido, la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) anunció a mediados de agosto la suspensión de todos sus servicios en el campamento en protesta por la "continua presencia de combatientes armados" en sus instalaciones, incluidas las escuelas del campamento.

Los enfrentamientos del 29 de julio se iniciaron después de que hombres armados intentaran asesinar a un miliciano islamista.

Más de 470.000 refugiados palestinos están registrados por la UNRWA en el Líbano, aunque se calcula que sólo algo menos de la mitad de ellos residen todavía en el país mediterráneo.

(c) Agencia EFE