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Una ceremonia de casamiento, en medio de las protestas por el asesinato de George Floyd

WASHINGTON (AFP).- Ella, un vestido color perla, el pelo recogido y un tocado hermoso en el pelo. Él, un traje negro impoluto y moño. Ayer, en medio de las masivas protestas por el asesinato del afroamericano George Floyd en todos los Estados Unidos, en Filadelfia, una pareja, ellos, celebraron su casamiento con las marchas de fondo y testigo.

Kerry-Anne y Michael Gordon iban a dar el sí en el registro civil pero su turno fue cancelado debido al caos generado por las manifestaciones, que provocaron se decretara el toque de queda en cuarenta ciudades. Por ello protagonizaron una pequeña ceremonia al aire libre justo cuando miles de personas pasaron por el Benjamin Franklin Parkway para repudiar la brutalidad policial el país. No fue una sorpresa. Sabían de la marcha. Fue su gesto.

"Fue un momento muy poderoso", dijo Kerry-Anne Gordon, de 35 años, de acuerdo con lo publicado por ABC News."Somos representantes de nuestra cultura. Fue un momento muy, muy enriquecedor para nosotros teniendo en cuenta todo esto que está sucediendo".

Por su parte Michael, de 42 años, aseguró que los problemas se viven desde hace mucho tiempo pero destacó las marchas como algo positivo. Además contó que como descendiente de la población del Caribe, sintió el crimen a nivel personal y afirmó que las manifestaciones hicieron de su boda un día aún "más memorable". "Todos vemos la injusticia. Todos queremos ver que la aguja se aleje del statu quo y por eso este día fue aún más memorable", dijo.

Desde el 25 de mayo, día del crimen de Floyd en manos de un policía blanco que lo arrestó, según la denuncia, por querer pagar con un billete falso y luego lo esposó en el piso y los asfixió con su rodilla en el cuello, en el país se registraron cientos de protestas, que incluyeron violencia, saqueos, el incendio de tiendas y cientos de arrestos en medio de la represión con balas de goma y gases lacrimógenos por parte de las fuerzas de seguridad. Las marchas se multiplicaron desde Nueva York a Los Ángeles, pero tuvieron su epicentro en Washington, donde miles de personas rodearon las calles cercanas a la Casa Blanca.

"Sin justicia no hay paz", clamaron los manifestantes delante del monumento de Lincoln y ante el Capitolio. A cinco meses de las elecciones presidenciales y en un momento en que los Estados Unidos todavía lucha contra el coronavirus, la muerte de Floyd abrió el debate sobre la brutalidad policial y las desigualdades que sufren los ciudadanos negros, agudizadas por la pandemia, que mostró que padecen tasas superiores de mortalidad y desempleo.