FOTOS | La impresionante y singular central eléctrica sostenible que tiene hasta una pista de esquí en el techo

Dinamarca posee uno de los edificios más curiosos del mundo: CopenHill, o Amager Bakke, como se le llama en danés.

La idea de edificar una estructura multifuncional que combina una planta de energía sustentable con instalaciones de ocio que incluye una pista de esquí la llevó a cabo el estudio de arquitectura danés BIG (Bjarke Ingels Group) en la antigua zona industrian de Copenhague.

Se trata de un edificio con hornos y turbinas que funcionan las 24 horas del día y convierten 440 000 toneladas de desechos en electricidad limpia y calefacción para 150.000 hogares cada año.

El proyecto forma parte de la estrategia de la capital danesa para convertirse en la primera ciudad del mundo en alcanzar la neutralidad de carbono para 2025.

Su techo en forma de cuña alberga una pista de esquí en invierno y una ruta de senderismo en verano, y su fachada más alta es un muro de escalada de 85 metros, que dice ser el más alto del mundo.

Fue seleccionado como el Edificio del Mundo en el Festival Mundial de Arquitectura de 2021.

La planta integra la tecnología denominada “DynaGrate” que no requiere detener los procesos cuando se detectan metales en los residuos. DynaGrate también se enfría con agua, lo que reduce la formación de óxido nítrico y la energía consumida por los ventiladores. Estos factores contribuyen a costos operativos más bajos que los métodos tradicionales.

Paradójicamente, la creciente eficiencia de Copenhague en la reutilización y el reciclaje ha generado el problema de que la ciudad no genera la suficiente basura para mantener el funcionamiento de la planta. Para mantener la producción de energía han tenido que importar basura de países vecinos.

Fuentes: Earthbound, Interesting Engineering, Architecture Today, CopenHill.