Candidatos relanzan campañas por la presidencia de Bolivia

LA PAZ (AP) — En medio de una pausa de las protestas sociales y pese a que los contagios del coronavirus siguen en auge, los ocho candidatos a la presidencia de Bolivia relanzan sus campañas con eventos virtuales y caravanas rumbo a la crucial contienda del 18 de octubre.

El Tribunal Supremo Electoral estableció que desde el domingo se inicien las campañas con “características especiales” debido a la emergencia sanitaria por el COVID-19 y en momentos en que el país andino aún sufre los embates de la enfermedad que postergó los comicios.

El Ministerio de Salud informó que hasta el domingo se registraban 120.241 casos de la infección y 5.398 decesos, mientras el país avanzaba en una reapertura gradual de las actividades económicas.

La región oriental de Santa Cruz, al este de Bolivia y motor agroindustrial del país, fue elegida por los postulantes para iniciar con sus actividades políticas que fueron transmitidos en vivo por las redes sociales.

La pandemia generó una crisis en el sistema sanitario y obligó a postergar tres veces la fecha de las elecciones, lo que desencadenó fuertes protestas de sectores afines al expresidente Evo Morales, exiliado en Argentina desde diciembre. El exmandatario asumió desde allí el cargo de jefe de campaña de su partido político, el Movimiento Al Socialismo (MAS).

El partido de la presidenta interina y candidata, Jeanine Áñez, fue el primero en relanzar su candidatura y ha ido calentando motores hace dos semanas en eventos públicos en los que ha atacado a sus principales adversarios y punteros en las encuestas de opinión.

El exministro de Economía y candidato por el MAS, Luis Arce, y el expresidente Carlos Mesa encabezan las preferencias en los sondeos, y ambos realizaron caravanas en la jornada.

“Vemos más guerra sucia que propuestas” entre los candidatos, dijo el analista político Marcelo Silva, de la Universidad Nuestra Señora de La Paz, un centro de estudios privado. Criticó a su vez que el TSE no haya establecido una reglamentación clara para evitar las aglomeraciones en momentos de la pandemia.

Las elecciones fueron inicialmente fijadas para el 3 de mayo, pero se aplazaron debido a la crisis sanitaria para el 6 de septiembre y luego para el 18 de octubre, respectivamente.

“Esta es la campaña que más tiempo ha durado en la historia del país", apuntó a The Associated Press Jorge Dulón, politólogo y profesor en la Universidad Católica Boliviana.

Para Dulón, durante este tiempo los principales candidatos fueron “golpeados” por diferentes temas. Mencionó que en el caso de la mandataria interina ha tenido que lidiar con cuestionamientos sobre la forma como afrontó la crisis de salud a raíz del coronavirus y por denuncias de corrupción.

“Ella y su gente piensan que endureciendo el discurso contra Mesa y Arce, puede alcanzarlos", expresó. Mientras tanto, el analista estima que la denuncia en la que presuntamente Morales mantuvo una relación con una menor cuando era presidente “se verá reflejado en el apoyo a Arce”.

Las críticas a Mesa son por no tener una posición frente a los conflictos sociales, añadió Dulón.

Bolivia trata de zanjar una crisis política tras la violenta convulsión de fines del año pasado que dejó 36 muertos y obligó a renunciar a Morales tras ser acusado de fraude en las elecciones en las que buscaba un cuarto mandato. Posteriormente, Áñez asumió la presidencia de forma interina con la misión de llamar a nuevos comicios.