Cameron cree probable que una bomba causara la caída del avión ruso en Egipto

Por Paul Sandle LONDRES (Reuters) - El primer ministro británico, David Cameron, dijo el jueves que cada vez hay más probabilidades de que una bomba causara la caída de un avión ruso sobre Egipto provocando la muerte de 224 personas, y el presidente estadounidense, Barack Obama, aseguró que Washington consideraba esa posibilidad "muy seriamente". Pero Moscú, que lanzó hace más de un mes ataques aéreos en Siria contra combatientes islamistas, entre ellos de Estado Islámico, cree prematuro sacar conclusiones sobre un atentado. En una llamada telefónica, Putin dijo a Cameron que era importante evaluar las causas del accidente basándose en la información de la investigación oficial, dijo la agencia de noticias Interfax. Egipto, que depende del turismo como una fuente crucial de ingresos, aseguró que no habían pruebas de que un artefacto explosivo fuera el culpable de la tragedia. Un grupo insurgente egipcio afiliado al Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del accidente, lo que en caso de confirmarse se convertiría en el primer ataque contra la aviación civil por parte de la organización yihadista más violenta del mundo. Cameron, quien recibió el jueves al presidente egipcio, Abdul Fatah al-Sisi, en el marco de una visita programada con anterioridad, dijo: "No podemos estar seguros de que el avión ruso fuera derribado por una bomba terrorista, pero parece que esto es cada vez más probable". Su secretario de Exteriores, Philip Hammond, sostuvo que había "una posibilidad significativa" de que el Estado Islámico fuera el responsable, dadas las distintas informaciones sobre la mesa, incluida la reivindicación. En una señal de preocupación, Obama dijo en una entrevista en la radio: "Creo que hay una posibilidad de que hubiera una bomba a bordo. Y no tomamos eso muy en serio". Reino Unido, Irlanda, Alemania y Holanda han suspendido los vuelos hacia y desde la ciudad egipcia de Sharm al-Sheikh, dejando a miles de turistas europeos varados en el centro turístico del Mar Rojo, de donde había despegado el avión antes de estrellarse.