Con cabezazo de Martínez, Bayern conquista la Supercopa

BUDAPEST (AP) — Javi Martínez marcó mediante un cabezazo en el alargue y el Bayern Múnich comenzó la temporada superando el jueves 2-1 al Sevilla para conquistar la Supercopa en un estadio donde se permitió el ingreso de algunos aficionados.

Siete años después de conseguir otro tanto en tiempo extra para que el Bayern obtuviera su cetro anterior de la Supercopa, Martínez se elevó entre varios jugadores e hizo contacto con el balón a los 104 minutos.

El español aprovechó así el rebote, luego que el arquero Assine Bounou había rechazado un disparo de David Alaba.

Pudo ser uno de los últimos partidos de Martínez con el Bayern. El mes pasado, el presidente de la junta del club bávaro Karl-Heinz Rummenigge dijo a la prensa alemana que el versátil defensa buscaba marcharse.

Disputar una prórroga no era lo que pretendía ninguno de los dos equipos, en una campaña que comenzó con demora por la pandemia de coronavirus y que tendrá un calendario más congestionado.

Para Bayern y Sevilla, el cotejo marcó el comienzo de una racha de cuatro partidos en 11 días y llegó casi un mes después de que el equipo alemán había derrotado al París Saint-Germain en la final de la Liga de Campeones.

Sevilla, monarca de la Liga Europa, tomó la ventaja en los albores, cuando el austriaco Alaba cometió una falta sobre Ivan Rakitic. El argentino Lucas Ocampos convirtió el penal resultante a los 13 minutos.

Bayern igualó a los 34, cuando Leon Goretzka dio destino de gol a un balón que le cedió con toda precisión Robert Lewandowski.

El club alemán tuvo el control durante el complemento, pero vio invalidado un par de tantos, uno por fuera de juego y otro por un empujón de Lewandowski. A los 87, se salvó cuando Manuel Neuer atajó un tiro de Youssef En-Nesyri, en un contragolpe.

“Hemos perdido una final en la que teníamos puestas muchas ilusiones”, expresó el técnico del Sevilla, Julen Lopetegui. “Estoy triste por los chicos, porque han conseguido llevar el partido a la prórroga y han llevado al límite al Bayern. Eso tiene mucho mérito. Hemos tenido la ocasión de ganar el partido justo en el momento... pero no pudo ser”.

El encuentro se realizó frente a unos 15.000 espectadores en la Puskas Arena, que se ocupó así a un cuarto de su capacidad. La UEFA probó un retorno parcial de los aficionados, de cara a las fases de grupos de la Liga de Campeones y de la Liga Europa.

Pero la decisión fue polémica, en medio de la reciente alza de casos de coronavirus en Europa —y particularmente en Budapest.

Unos 800 de los 2.100 boletos vendidos a seguidores del Bayern fueron devueltos antes del partido. Los políticos en el estado alemán de Baviera advirtieron a los hinchas que no debían ir a Budapest.

Sevilla distribuyó unas 500 entradas. Ello significa que los aficionados húngaros representaron la gran mayoría de las personas que concurrieron en el estadio.