Rajoy apuesta por el 'candidato xenófobo' para aguantar en Cataluña

Releva a Sánchez-Camacho para evitar un descalabro electoral

La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho (c), entre Xavier García Albiol que encabezará la lista para las elecciones previstas para el 27S y Andrea Levy que irá en segundo lugar. EFE
La presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho (c), entre Xavier García Albiol que encabezará la lista para las elecciones previstas para el 27S y Andrea Levy que irá en segundo lugar. EFE

El PP no podía esperar más si pretendía mantener sus fuerzas en Cataluña tras las próximas elecciones del 27 de septiembre. Alicia Sánchez-Camacho ha sido apartada como candidata del PP catalán en favor del polémico exalcalde de Badalona Xavier García Albiol.

La polémica viene por sus campañas: 'Limpiando Badalona' fue su lema estrella en las elecciones de 2011, Le tildaron de xenófobo, pero funcionó. Albiol pasó de ser en 1991 el único concejal del PP en su localidad natal, a lograr 11 ediles en el 2011, cuando fue el más votado con 26.920 papeletas. En aquella campaña soltó perlas como:

 

  • "O aceptan nuestros valores o que se vuelvan por donde han venido".

  • "Con 600.000 parados en Cataluña no creo que hagan falta más inmigrantes".

  • "Se ha puesto de moda decir que soy xenófobo. Pero cuando una pareja joven en paro, con un hijo, va a pedir una ayuda económica y se la niegan para dársela a una persona que lleva dos días empadronada, eso no es xenofobia, sino supervivencia".

En los meses posteriores incluso acuñó el polémico: "Si hay alguien a quien no le parezca bien [la prohibición de los rezos del Ramadán en la vía pública], lo que tiene que hacer es darme su dirección y se los enviaré a rezar a la puerta de su casa, a ver qué les parece".

Y si su reelección como alcalde de Badalona no se materializó el pasado mes de mayo, no fue por él. Su campaña siendo alcalde le valió 30.559 votos -más que en 2011-, aunque el pacto de los partidos de izquierdas lo apartó del bastón de mando. Su campaña, ya se la imaginan:

 

  • "No quiero inmigrantes que han venido a robar, a delinquir y a hacer la vida imposible a Badalona".

  • "Haré todo lo posible legalmente para que los problemáticos se vayan".

La decisión ya se ha tomado, pero falta explicar el cómo. La cara de Sánchez Camacho tras la comparecencia era de cierta tristeza y amargura, aunque el mensaje oficial es que ella ha decidido dar un paso a un lado para no perjudicar al partido ya que todos los sondeos realizados dan unos números muy pobres al PP en las elecciones de septiembre. En parte por la abstención, y en mayor medida por la fuga a Ciudadanos. 

Según las estimaciones realizadas por NC Report para La Razón, para que el PP recuperase los votantes de las autonómicas de 2012 debería reconquistar a 176.000 electores que se han pasado a Ciudadanos y otros 57.000 que están instalados en la abstención. De los votantes de 2012, el 37,3% dice que votará a Ciudadanos, y el 12,1% se sitúa en la abstención. Conservan el 46% de sus votos.

Y el PP quiere frenar esto con un candidato que habla claro, no se esconde -esto pensando en el órdago independentista- y que es conocido por todo el electorado, algo importante dada la cercanía de los comicios. Y Albiol cumple con ambos requisitos. Sus polémicas declaraciones dan fe de la primera premisa, y que media España le conociera cuando solamente era concejal mientras que apenas sabía dar el nombre del alcalde de Badalona, le avalan para la segunda.

Mariano Rajoy tomó nota de todo y maniobró para relevar a Sánchez Camacho. No quiere dejar nada al azar en Cataluña y su mano está detrás de todo este movimiento. Hasta el punto de que junto a Albiol, como número dos de la candidatura por Barcelona, figurará desde hoy mismo Andrea Levy. Una dirigente recientemente nombrada vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, por lo que se convertirá en el enlace directo entre el presidente del Gobierno.

Y Albiol ha captado el mensaje: Su rival en las urnas es Albert Rivera y no otro. ¿Que no se lo creen? Lean sus primeras declaraciones como candidato: "Hoy asumo la responsabilidad de liderar la candidatura en unos momentos muy difíciles para Cataluña y España; podría haber hecho como Rivera e irme a Madrid a que me aplaudieran y me dieran golpes en la espalda, pero Catalunya no se puede permitir eso". La vuelta del verano se presenta movidita en Cataluña.