Descubren cartas de amor de la Primera Guerra Mundial en un ático de Indiana

Ya perforaban en la madera y removían viejos cables de electricidad del ático de una casa, cuando los operarios de una compañía de restauración de domicilios hicieron un conmovedor descubrimiento en Jasper, al sur de Indiana, en Estados Unidos.

Protegidas por un sobre con las evidentes marcas del paso del tiempo, se conservaban varias cartas de amor que un soldado había escrito a su amada durante la Primera Guerra Mundial.

De manera que este proyecto de renovación ha descubierto su primera sorpresa: de su puño y con su letra, la confesión que Clemente Berger, un joven soldado, le hacía saber a su futura esposa Mary Borho en julio de 1918 desde una base norteamericana, en espera de su viaje hacia lo desconocido, la añoranza y la posibilidad de que le llegara la muerte.

Fue entonces que Phil Mathies y su hermana Barbara, los dueños de la casa en cuya buhardilla había aparecido semejante tesoro, decidieron intentar contactar con los descendientes de aquel fervoroso soldado. En realidad no era improbable que hijos o nietos de Berger todavía vivieran en Jasper.

Con la ayuda del periódico local, cientos de residentes en esa ciudad pudieron leer líneas como esta: “…cada día estás más cerca que nunca de mí, te anhelo cada vez más”.

Y no corrió mucho tiempo antes que alguien llamara a su puerta.

Las hermanas Marie McCune y Nancy Téder, sobrinas de aquel soldado que regresó de la guerra y contrajo matrimonio con Mary Borho, alucinaron cuando abrieron las páginas del periódico.

“Ahí puede leerse lo que él sentía por ella, pero él sabía que tenía antes un servicio por cumplir”, declaró a la presa Barbara Schrader, la otra propietaria de la casa.

Tras su regreso de la guerra, Clemente Berger contrajo matrimonio con Mary Borho en 1920.

Se desconoce por qué razón esas cartas fueron a parar al ático de Phil Mathies. De cualquier manera, después de casi un siglo, han sido recuperadas por los descendientes del soldado galante. Serán sus bisnietos, radicados en Louisville, quienes tendrán la custodia de este acto de amor.