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La muerte de un joven que contrajo peste bubónica desata preocupación

La noticia de la muerte de un jovencito que contrajo la peste bubónica en Estados Unidos ha hecho saltar las alarmas. ¿Es posible que regrese la epidemia que cobró las vidas de millones de personas en el siglo XIV?

Taylor Thomas Gaes era un prometedor atleta de Colorado que contrajo la peste septicémica, una infección bacteriana trasmitida a través de la picadura de una pulga. El adolescente murió el mismo día de su cumpleaños 16, informó el diario The Denver Post.

Si bien la noticia desconcierta, más sorprendente aún es saber que este no es el único caso reciente de la enfermedad que muchos creían erradicada en la Edad Media. En mayo los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) revelaron que en el 2014 cuatro personas contrajeron la peste en Colorado, que les trasmitió un perro. Todas sobrevivieron.

David Hooper, jefe de la Unidad de Control de Infecciones del Hospital General de Massachusetts, aclaró a Yahoo Health que la temible enfermedad existe todavía y es trasmitida fundamentalmente por roedores, como ocurrió hace siete siglos.

Cada año se diagnostican un promedio de siete casos de peste en EEUU, de acuerdo con los CDC. Existen tres formas comunes de la infección causada por la bacteria Yersinia pestis: la bubónica, que consiste en la infección de los ganglios linfáticos; la neumónica, una infección de los pulmones; y la septicémica, una infección de la sangre. Gaes murió de peste septicémica; las cuatro infecciones detectadas el año pasado fueron de la variante neumónica.

La mayoría de los casos se producen entre finales de la primavera e inicios del otoño.

Los síntomas pueden variar pero en todos los casos hay fiebre alta y señales de gripe. Las personas con la variante neumónica también pueden desarrollar tos con sangre, y los que contraen la peste bubónica suelen sufrir una dolorosa inflamación de los ganglios linfáticos.

¿Cómo evitar confundirla con la gripe común? Hooper dice que el enfermo debe tener en mente si ha estado expuesto a los roedores o pulgas recientemente. En ese caso, debe reportarlo de inmediato al médico pues la tasa de mortalidad es elevadísima, de un 50%, pero se puede sobrevivir si se detecta a tiempo.

Actualmente se trata con potentes antibióticos como levaquin, estreptomicina, doxiciclina y tetraciclina, que están aprobados para el tratamiento de la infección.

Justamente debido a que ya existe un tratamiento, y a que la población actual vive en mejores condiciones higiénicas, es prácticamente imposible que se produzca una epidemia letal de peste bubónica.

"Es muy rara y hay un riesgo muy muy bajo para la población en general", aseguró Hooper. "A fin de cuentas, hay muchas otras enfermedades comunes que es mucho más probable encontrar que la peste."

De cualquier modo, los investigadores siguen tratando de erradicar la enfermedad y los CDC confirmaron que se trabaja en una vacuna, aunque no se sabe cuándo estará disponible.