Anuncios

Por qué tu canción favorita te toca la fibra sensible

 

Imagen: Wilkins et al.
Imagen: Wilkins et al.

 

Estás conduciendo de vuelta a casa y en la radio comienzan a sonar los primeros compases de guitarra del 'Sweet Child O' Mine'. Ibas concentrado en otros pensamientos, pero cuando te quieres dar cuenta estás conteniendo la respiración y tienes los ojos acuosos. La canción ha despertado en ti un recuerdo, quizá el de un viaje de adolescencia, "cuando todo era tan brillante como el cielo azul", y ahora estás encogido por dentro.

Conocer lo que hace la música a nuestro cerebro es una vieja aspiración de la neurociencia. Hace unas semanas hablamos en Neurolab cómo la canción del verano nos machaca la cabeza gracias a un 'fallo' del sistema: nuestro gusto por la repetición. Pero, ¿qué sucede cuando escuchamos nuestra canción favorita?

El equipo de R. W. Wilkins ha publicado recientemente en Scientific Reports un estudio en el que han intentado explicar "por qué experimentamos estados emocionales comparables cuando escuchamos música tan diferente como la de Beethoven y Eminem". Para su trabajo, los científicos analizaron la actividad cerebral de 21 voluntarios mientras escuchaban tres canciones: una que simplemente les gustaba, su tema favorita y una canción que les resultaba horrible.

Los autores del estudio encontraron que la canción favorita activa un patrón de actividad que ya han identificado en otras ocasiones y que se conoce, de momento, con el nombre de "red neuronal por defecto". Este patrón de actividad se asocia con la introspección, la conciencia de uno mismo y los procesos en los que dejamos vagar nuestra imaginación. Cuando se activa esta red, se desactiva la red que trabaja cuando estamos concentrados en otra tarea, un mecanismo que parece funcionar de manera diferente en personas con esquizofrenia y otro tipo de trastornos mentales.

 

Imagen: Wilkins et al.
Imagen: Wilkins et al.

 

Los científicos consideran que su resultado es especialmente valioso en lo que respecta a la búsqueda de una explicación sobre los motivos últimos por los que la música nos conmueve. Y al hecho de que lo puedan hacer registros tan distintos como una ópera o un concierto de rock. Mientras escuchan su tema favorito, recuerdan los investigadores, "las personas describen la experiencia como profundamente personal y aseguran que trae a su mente pensamientos y recuerdos inesperados". El fenómeno, recalcan, se produce aunque el tema no tenga letra y sea meramente instrumental, y la aparición de este patrón de la red neuronal por defecto sugiere, a su entender, una posible explicación para esta introspección sobrevenida que producen los temas musicales.

Al mismo tiempo, los autores creen que este hallazgo puede ayudar a profundizar en una vía para tratar a pacientes cuya red neuronal por defecto parece estar alterada, ya sean víctimas de la depresión, el autismo o la esquizofrenia. Si la canción favorita ayuda a reconectar estos circuitos, podrían diseñarse nuevas pruebas y explotarse de manera más sistematizada como terapia.

Referencia: Network Science and the Effects of Music Preference on Functional Brain Connectivity: From Beethoven to Eminem (Scientific Reports)

Historia original: Yahoo España.