La extraña afección que deja dormidos a los habitantes de un pueblo

El 28 de febrero se celebró el día mundial de las #EnfermedadesRaras, un término que engloba a una gran diversidad de enfermedades con una baja incidencia en la población. Se entiende como enfermedad rara la que afecta a solo 1 cada 2.000 personas, pero que sean raras no debe significar que sean invisibles. De hecho, se estima que el 65% de estas patologías son graves e invalidantes para quien la padece.

Desde Cuaderno de ciencias en Yahoo, y para recalcar la importancia de no olvidarnos de ellas y apostar por la investigación de sus causas y posibles remedios, hoy nos gustaría compartir con ustedes la historia de una de ellas.

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Amanece nubloso en Kalachi, una pequeña aldea en la zona norte de Kazajistán con una población de apenas seiscientas personas. Son las 08:20 de la mañana y en la mesa ya está todo preparado para desayunar. Sin embargo, un joven matrimonio sirve el café y algunas galletas sin esperar a que su hijo de ocho años baje a acompañarlos. Se llama Mihail y hace unos días, mientras jugaba en el salón, el joven comenzó a tambalearse, perdió la mirada y se quedó dormido… desde entonces aún no ha despertado.

Desde que apareció el primer caso hace dos años, una alarmante y desconocida afección está desconcertando a los habitantes de esta pequeña aldea: Sin motivo aparente, sin causa conocida, y lo que es aún peor, sin remedio hasta el momento, los habitantes de Kalachi caen en un profundo sueño y permanecen dormidos durante días. Es sobre todo preocupante en niños y jóvenes que, mientras están jugando, pintando o comiendo, comienzan a marearse, a sentirse débiles, pierden reflejos y finalmente terminan cayendo dormidos ante la incrédula y asustada mirada de sus padres.

El Valle o la cuenca del sueño, el pueblo de los dormidos… En estos dos últimos años nos han llamado de muchas maneras, confiesa uno de los vecinos de Kalachi cuando se refiere a este extraño fenómeno que mantiene en vilo a los habitantes de la aldea.

Lo que está ocurriendo en este pueblo kazajo ha dejado perplejos a todos los especialistas que durante los últimos meses han intentado estudiarlo aunque por el momento aún no se sabe la causa ni la forma de enfrentarse al problema.

Hace tan solo unos meses, en la humilde escuela del pueblo, hasta ocho niños se quedaron dormidos en un mismo día mientras pasaban lista en el aula, mientras hacían ejercicio en clase de educación física o mientras estaban sentados en sus pupitres. En un breve paseo por las destartaladas calles de Kalachi, Olga Samusenko durante un video de RT, señala algunas casas de vecinos diciendo: Esa casa del fondo fue una de las primeras en ocurrir, allí en frente hace unas semanas dos niños se quedaron dormidos y no despertaron hasta que pasaron cuarenta horas…

Los afectados por este repentino sueño son llevados al hospital para hacerles todo tipo de pruebas pero hasta el momento la causa de esta inquietante epidemia de sueño sigue sin conocerse. Mientras tanto, todos en el pueblo conocen a alguien que ha sufrido esta prolongada somnolencia y todos saben que en cualquier momento les puede tocar a ellos quedarse dormidos…

Este desconocimiento del fenómeno de Kalachi ha conseguido que surjan numerosas teorías, algunas más descabelladas que otras, que por ahora tan solo se quedan en vagas especulaciones. Para muchos la historia reciente del pueblo podría tener importancia en los hechos que ahora están ocurriendo.

En años más prósperos, Kalachi era un pueblo pujante en el que una mina de uranio daba trabajo a muchos de sus habitantes. Pero todo es muy extraño puesto que la mina se cerró hace ya más de dos décadas y durante todo el tiempo que estuvo abierta nadie de los trabajadores sufrió ninguno de estos desfallecimientos.

Los expertos han analizado el agua y los recursos acuíferos del pueblo y no hay nada fuera de lo normal… el problema no está en el agua.

Otros creen que es el viento procedente de la mina pero esta solución tampoco parece tener sentido puesto que las mediciones realizadas alrededor del pueblo ofrecen niveles de radiación normales por debajo de los 16 microroentgen.

Todo lo que se ha medido y estudiado hasta el momento como el agua, la radiación, el suelo o la vegetación cercana a la aldea no ha arrojado ningún resultado concluyente y todos los datos están en sus índices normales.

En una investigación realizada por la agencia de prensa RT, los periodistas afirman haber medido un foco dentro de la propia mina con niveles sospechosos de radiación, pero tampoco parece ser la respuesta puesto que se encuentra muy alejada del pueblo y las mediciones del aire alrededor del pueblo siguen siendo normales.

El misterio de esta extraña enfermedad sigue sin resolverse mientras las familias viven angustiadas en espera de quién será el siguiente en dormirse sin poder saber exactamente el porqué.

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