La curiosa fotografia de un sapo comiéndose un murciélago

Lo primero que se puede pensar cuando se ve la foto a la que acompaña este texto es que se trata de algún tipo de nueva especie. Bueno, tal vez no lo primero, pero sería la conclusión lógica después de descartar algún tipo de fotomontaje o de ingeniería genética. Y sin embargo no es nada parecido, simplemente una anécdota.

Según cuenta Yufani Olaya, el autor de la foto, la situación fue bastante extraña. Él trabaja en una zona de reserva en el Amazonas peruano. Una noche encontró a un sapo parado, con la boca abierta esperando a que algún insecto entrase en ella. Pero lo que entró fue un murciélago.

De hecho, el murciélago estaba haciendo más o menos lo mismo. En muchas ocasiones estos animales vuelan a muy baja altura, a escasos centímetros del suelo, en busca de insectos voladores sobre los que depredar. Y estando concentrado en su tarea, no se dió cuenta de que entraba en la boca del sapo.

La mala suerte del quiróptero es que los sapos son tremendamente voraces. Son capaces de comerse prácticamente cualquier cosa que quede a su alcance. Así que el anfibio cerró la boca y trató de comérselo.

Por suerte para el murciélago, los sapos no tienen dientes. Básicamente atrapan a las presas, las presionan con la boca y la garganta, para tragarlas rápidamente. Y el bocado era demasiado grande. Tras un rato de forcejeo, el murciélago consiguió cansar al sapo, que simplemente lo escupió al ver que no podría tragarlo.

Tras esto, ambos animales se quedaron en su sitio. Los dos, según cuenta el fotógrafo, bastante molestos. Tras un momento de vacilación, el murciélago salió volando, no fuese a ser que al sapo le diese por volver a intentarlo.

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Fuente: Yahoo! España
La curiosa fotografia de un sapo comiéndose un murciélago