El viaje a Marte del Curiosity

Enviar un objeto del tamaño de un auto de la Tierra a Marte no es una tarea fácil. Lograr que aterrice sin el más mínimo desperfecto y que lo haga de tal manera que no tenga ningún obstáculo para comenzar a circular, es algo bastane más complicado.

Este fue el reto al que el Laboratorio de Propulsión de la NASA se enfrentó con el proyecto "Curiosity", un nuevo explorador marciano que será lanzado en el mes de Noviembre y cuyo objetivo es determinar si es posible vivir en el planeta rojo.

A diferencia de los dos exploradores anteriores, Spirit y Opportunity que eran del tamaño de un horno microondas, el Curiosity es mucho mayor,  aproximadamente del mismo tamaño que un Mini Cooper. También es más pesado, cuatro veces más que la primera sonda que tocó Marte.

El Curiosity irá equipado con sofisticadas herramientas de medición para examinar la atmósfera, el suelo y las rocas. Entre otros equipos lleva un laser que vaporizará rocas y sistemas para detectar compuestos orgánicos.

Se trata por tanto de un equipo grande, pesado, frágil, muy sofisticado, costoso al que hay que enviar a más de 55 millones kilómetros de distancia en una misión que no admite fallos. Solamente el viaje de la sonda desde la Tierra a Marte requiere 8 meses. 

La solución que la NASA ha ideado para conseguirlo se muestra paso por paso en este interesante video creado por el Laboratorio de Propulsión del Instituto de Tecnología de California.


Fuentes y video: NASA