La violencia contra las mujeres marca las elecciones en la India

Una oscura carretera es la única forma de volver a casa después de trabajar todo el día en la capital. Habitualmente este camino está lleno de hombres que suelen estar borrachos. El paseo es de solo 10 minutos, pero el miedo de poder ser violadas dura mucho más tiempo.

Se trata del pequeño pueblo de Lakarpur, situado a las afueras de Nueva Delhi (India), pero esta desagradable situación se repite a lo largo y ancho de todo el país.

“Es aterrador. Siempre rezo una oración y camino lo más rápido que puedo”, confiesa una mujer a The Guardian.

Por eso las mujeres indias son el principal foco de los candidatos a las elecciones generales que se están celebrando en India. Los guiños que reciben de los partidos en liza las han convertido en las grandes protagonistas de estos comicios y todos los contendientes buscan atraer su voto con promesas y cambios.

Pero esta misión no es nada sencilla; la inseguridad en el país y el preocupante aumento de la violencia sexual ponen en pie de guerra a las féminas, que además tienen miedo de cosas tan cotidianas como montar en transporte público o volver caminando a casa.

No es para menos, aún permanece en la memoria la brutal violación en grupo y posterior asesinato de una estudiante de 23 años que viajaba en autobús en diciembre de 2012 y que conmocionó a toda la sociedad, que exigía una solución para evitar que hechos tan terribles ocurrieran de nuevo.

En los últimos meses el país ha intentado endurecer las leyes que castigan estos ataques sexuales, aunque de momento no se ha visto un reflejo en la calle. Por eso estos comicios cobran una mayor importancia; los principales candidatos han hecho una llamada al voto femenino, llegando incluso a prometer el empoderamiento de la mujer.

Las elecciones comenzaron el pasado lunes y se prolongarán durante más de un mes, hasta el 12 de mayo, con 814 millones de personas que pueden ejercer su derecho al voto. En esta segunda fase de los comicios se elegirán seis de los 543 escaños del Parlamento Nacional. Concretamente son los estados de Nagaland, Manipur, Arunachal, Pradesh y Meghalaya donde están en juego estos asientos.

Sin embargo, la atención que están recibiendo las mujeres no se corresponde, al menos de momento,  con su importancia dentro de la sociedad, apartadas casi completamente de la política y prácticamente condenadas, en muchas ocasiones, a las labores de la casa.

La promesa de los tres partidos favoritos en las encuestas de conseguir que al menos un tercio de los diputados sean mujeres parece muy lejana. De hecho en la actualidad solo el 11% de los parlamentarios son del género femenino y de los más de 150 candidatos que concurren a los comicios, el porcentaje de féminas apenas llega al 10%.

Una realidad que muestra a las claras que India todavía tiene un larguísimo camino por delante, no solo por lograr el importante desarrollo económico del que presume, sino también por conseguir parar una peligrosa espiral de violencia machista que está desangrando al país sin remedio.

Publicado originalmente en Gaceta Trotamundos.