El vuelo arácnido sobre los cielos de Texas

Extraños objetos blancos recorrieron en días pasados los cielos del norte de Texas. Personas sorprendidas levantaban la mirada en Dallas, Fort Worth y en ciudades contiguas y miraban una rara sustancia blanca que pasaba flotando sobre sus casas, sobre sus autos y que a veces se posaba en sus techos, en sus jardines. Incluso sobre ellos mismos. Una sustancia ligera, blanca y pegajosa.

Algunas personas, según relata la televisora local NBC-DFW, se comunicaron extrañadas para preguntar si era real el fenómeno. Algunos quizá pensaron que podría ser algo venenoso o peligroso. O proveniente de fuera de este mundo. En ciertos casos, los hilos de esa sustancia blanquecina llegaron a ser de hasta 10 pies de largo, según testimonios recogidos por la NBC-DFW.

En realidad todo es completamente natural: la misteriosa sustancia blanca es telaraña, si bien producida y diseminada en grandes cantidades sobre amplias extensiones geográficas en un fenómeno al que, de acuerdo a expertos del Zoológico de Dallas entrevistados por la televisora local CBS-DFW, se le llama ‘ballooning’ o vuelo arácnido. Y resulta ser común en esta época del año en ciertas áreas del país.

El vuelo arácnido sucede cuando pequeñas arañas que acaban de nacer lanzan su tela para ser transportadas por el viento a lugares distantes, de modo que puedan dispersarse y evitar así competir unas con otras en el mismo espacio. La telaraña opera como una suerte de vela que las impulsa en el aire. Además, ese vuelo protege a las arañas de depredadores y, desde luego, genera un espectáculo curioso para los humanos, y sus ciudades, que se cruzan en su paso.

Un especialista de la Universidad Texas A&M citado por la televisora NBC-DFW indicó que algunas arañas adultas también realizan en ocasiones el ‘ballooning’. Pero en general se trata de arañas recién nacidas las que se lanzan a volar por los aires.

El fenómeno es inofensivo y en general, salvo que se les tenga pánico a las arañas, no tiene efectos relevantes en la vida cotidiana de las personas. Por otro lado, el vuelo arácnido en ocasiones llega a ser espectacular: se han detectado vuelos arácnidos, por ejemplo, en medio del mar a cientos de kilómetros de la costa y, también, telaraña de ‘ballooning’ ha sido recogida en muestras de aire tomadas a 16,000 pies de altura por globos de análisis atmosférico.

Así que si de repente siente algo pegajoso en el cuello, o se mira en el espejo y cree tener el pelo súbitamente encanecido no se preocupe, quizá sólo recibió una muestra personal de vuelo arácnido.

-Jesús Del Toro es director del periódico RUMBO de Houston. @JesusDelToro