El libro en el que Trump intenta redimirse pero sigue mostrando su verdadera cara

Su exitosa (y para muchos inexplicable) carrera hacia la Casa Blanca ha sufrido un frenazo y Ben Carson se ha postulado por el momento como el favorito de los republicanos para tratar de recuperar la Casa Blanca. Por eso, el nuevo libro que acaba de presentar Donald Trump aparece en el horizonte como una oportunidad de recobrar las posiciones perdidas y matizar algunos de los comentarios en campaña que le han hecho perder apoyos.

Sin pelos en la lengua, el magnate de los negocios habla sobre las mujeres, sobre la inmigración, sobre las armas o sobre el éxito, personalizado en su figura, en Crippled America. How to make America great again (América paralizada. Cómo hacer que América sea grande de nuevo).

En las poco más de 200 páginas que tiene la obra, Trump intenta aclarar algunas de las polémicas en las que se ha visto envuelto. Una de las más sonadas ha sido sus comentarios despectivos hacia los mexicanos y el problema de la inmigración ilegal que envuelve a América.

Pese a que en el libro llega a afirmar que “ama la inmigración” y que es muy partidario de que estas personas “persigan el sueño americano”, lo cierto es que más adelante se le ven sus intenciones. Insiste en que es necesario construir un muro que separe Estados Unidos de México para evitar la llegada de los ilegales y pone como ejemplo el muro de Israel, como el prototipo perfecto de “que los muros funcionan”. Una frase más que cuestionable, aunque claro, si el objetivo es coartar la libertad de movimiento y separar, no se puede negar que crear barreras es la mejor de las maneras.

Tampoco esquiva la polémica sobre sus comentarios machistas, ya que fueron muy sonadas las críticas que vertió contra otra de las aspirantes republicanas a la Casa Blanca, Carly Fiorina, al manifestar lo siguiente: "¡Miren qué cara! ¿Alguien votaría por eso? ¿Pueden imaginar esa cara la de nuestro nuevo presidente?"

Trump afirma que trata a hombres y mujeres por igual y se considera a sí mismo un ejemplo en igualdad, ya que presume que muchas de ellas trabajan en sus organizaciones y ocupan “puestos importantes”.

Otro de los apartados es el que tiene que ver con el éxito y el magnate piensa que es un líder con experiencia en triunfar y que precisamente esas claves son las que le hacen una persona muy capacitada para guiar los designios de un país tan relevante internacionalmente como Estados Unidos.

Finalmente, respecto a las armas, un tema candente en el país después de que en los últimos años se hayan producido auténticas matanzas en colegios del país y se haya recuperado el debate sobre si deberían haber control de ellas, se posiciona como miembro de la Asociación del Rifle y dice que el problema “no son las armas, sino los delincuentes”.

Javier Taeño (@javiertaeno)