El asesino en serie más joven de la Historia de Argentina

Lo que pasa por la mente de una asesino en serie y qué es lo que lo lleva a cometer los más horripilantes crímenes es algo que ni los más prestigiosos psiquiatras e investigadores de la conducta humana han podido descifrar a ciencia cierta.

Infinidad pueden ser los motivos y pensamientos que provocan esa necesidad de asesinar, torturar y hacer daño a otras personas o animales.

La ciencia ha avanzado en los últimos cien años a una velocidad vertiginosa, pero, cuando nos encontramos con casos acontecidos hace un siglo, podemos comprobar estupefactos como no siempre la medicina supo detectar, diagnosticar o dar solución correctamente a terribles casos en los que había implicado algún criminal con las facultades mentales mermadas.

[Relacionado: Mary Ann Cotton, la primera asesina en serie de Inglaterra]

El 3 de diciembre de 1912 fue detenido en Buenos Aires el que se considera como el asesino en serie más joven de la Historia de Argentina, su nombre era Cayetano Santos Godino, aunque fue conocido por el apodo de "el Petiso Orejudo", debido a las enormes orejas que poseía. Un sobrenombre asociado a esa característica física que lo perseguiría durante toda su vida.

A través de esta entrada no pretendo hacer un relato pormenorizado ni describir los escalofriantes sucesos protagonizados por un jovencísimo asesino que empezó a matar a la temprana edad de 10 años, sino traer unos cuantos detalles del personaje y lo que le rodeó. Todas sus víctimas fueron niños y niñas menores que él y la primera a la que mató apenas tenía los 3 años recién cumplidos.

Pero, a pesar de haber asesinado con crueldad y saña a un total de cuatro pequeños, haberlo intentado con otros siete y además comportarse como un obsesivo pirómano al incendiar siete construcciones, nunca se le logró vincular con todo ello, a excepción de la última vez en que fue pillado con las manos en la masa y detenido. Por aquel entonces ya contaba con 16 años de edad.

El petiso orejudo había pasado prácticamente toda su vida en la calle, metiéndose en problemas y evadiéndose del infierno que vivía cada vez que regresaba a su casa, en la que le esperaban las terribles palizas que le propinaba su alcohólico y sifilítico padre.

La enfermedad de transmisión sexual se la habían contagiado antes de nacer su hijo, por lo que es muy probable que la misma afectase en la gestación y fuese la causa de los múltiples problemas de salud mental que tenía el joven Cayetano. Las palizas de su progenitor también influyeron en la personalidad del muchacho. En su cabeza presentaba una treintena de cicatrices producto de esos malos tratos.

Tras su detención varios fueron los médicos y expertos que se ofrecieron a  investigar la mente y razones que llevaron al petiso orejudo a cometer esos despiadados crímenes. Entre los múltiples informes de la época, podemos encontrarnos con diagnósticos sobre la patología del muchacho que decían que padecía  una "imbecilidad incurable" o lo describían cómo un "degenerado hereditario, imbécil que sufre la locura moral, por definición, muy peligrosa".

Hubo quien llegó a pensar que, la causa de sus problemas mentales y esa necesidad de matar, tenían una relación directa con el tamaño de sus orejas, llegando a operárselas cuando se encontraba en la cárcel, bajo el convencimiento que eso curaría su psicopatía.

[Te puede interesar: El médico asesino de la Segunda Guerra Mundial]

Pero nada más lejos, ya que el final de sus días le llegó a los 48 años de edad,   el 15 de noviembre de 1944,  tras haber pasado los últimos 32 años en penal de Ushuaia en el que  recibió una brutal paliza por parte de sus compañeros (según múltiples fuentes), al haber torturado y matado a los gatitos que los presos tenían como mascotas.

El caso del petiso orejudo llenó cientos de páginas en los periódicos de la época y ha servido de inspiración para realizar películas y libros basados en los sangrientos hechos que rodearon toda su vida. También se le puede encontrar representado en  forma de muñeco en el antiguo penal de Ushuaia, así como en otros museos.

Para aquellos que quieran saber más sobre la vida y crímenes de este escalofriante personaje, en la web del Petiso Orejudo se puede encontrar todo tipo de detalles, así como visionar el cortometraje que se rodó en el año 2001 y que lleva por título "Santos Godino, el petiso orejudo" y que os adjuntamos bajo estas líneas.

Fuente: Yahoo! España
El asesino en serie más joven de la Historia de Argentina