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Biden actúa rápido para entablar diálogo con Petro, el presidente entrante de Colombia

A menos de 48 horas de la histórica victoria de Gustavo Petro, exguerrillero del M-19 que ascendió a la presidencia de Colombia como el primer candidato de izquierda que gana una elecciones en décadas, el presidente electo recibió una llamada de Washington.

Del otro lado estaba el presidente Joe Biden, para felicitarlo por su victoria y “reafirmar” el apoyo de Estados Unidos a Colombia, dijo la Casa Blanca en un resumen de la llamada hecha el martes.

Un día antes, el Secretario de Estado Blinken ya había llamado a Petro con un mensaje similar “para reiterar el firme compromiso de Estados Unidos con la relación bilateral”, según un resumen de la llamada difundido por el Departamento de Estado.

Las llamadas han llamado la atención de muchos, tanto en Estados Unidos como en Colombia, sobre todo porque el presidente Biden esperó cinco meses para hablar con el presidente Iván Duque luego de su ingreso a la Casa Blanca. Los contactos señalan la intención de la administración de rápidamente construir una relación con un político controversial que ha prometido sacudir los cimientos de algunas de las áreas centrales de la cooperación bilateral.

“Las llamadas reflejan la importancia estratégica que Estados Unidos le da a nuestra relación con Colombia”, dijo el subsecretario adjunto Mark Wells en una entrevista con el Herald. Wells maneja los asuntos sudamericanos en el Departamento de Estado.

“Es una victoria sin precedentes de la izquierda colombiana, que no sucedía desde hace décadas”, dijo. “Y sabemos que hay mucho entusiasmo y preocupación sobre lo que implican esos cambios. Queríamos comunicarnos pronto con la nueva administración para felicitarlos por su victoria y comenzar realmente una discusión sobre sus prioridades y las nuestras”.

La relación de la administración Biden con el presidente colombiano saliente, Duque, ha tenido sus altibajos. La semana pasada, el secretario Blinken celebró con Duque en Washington el 200 aniversario de las relaciones diplomáticas entre las dos naciones. Y el presidente Biden anunció su intención de designar al país como un “gran aliado fuera de la OTAN” durante su primera reunión cara a cara con Duque en marzo.

Pero durante la campaña presidencial de 2020, el equipo de Biden se enojó con el apoyo de políticos colombianos, incluido el expresidente Álvaro Uribe, cercano a Duque, a los candidatos republicanos y al expresidente Donald Trump. La campaña de Trump también lanzó un anuncio utilizando los comentarios de Petro en apoyo de Biden para presentarlo como “el candidato de la izquierda radical”.

El actual director de Asuntos del Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional, Juan González, un colombiano estadounidense que en ese momento se desempeñaba como asesor de campaña de Biden, rechazó el anuncio y tuiteó que Biden “no conoce, ni le importa la opinión de Gustavo Petro”.

Dos años después, Biden transmitió un mensaje diferente. Tanto él como Blinken mencionaron al presidente electo de Colombia áreas en las que creen que los dos gobiernos pueden trabajar juntos, incluida la lucha contra el cambio climático y la implementación del acuerdo de paz de 2016 entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, que la administración Biden eliminó de la lista de grupos terroristas en noviembre pasado.

En su discurso de aceptación el domingo, Petro propuso un diálogo con el gobierno estadounidense para acelerar la transición de la región hacia las energías verdes. Wells dijo que había “muchas oportunidades” en la expansión de los programas existentes para preservar la Amazonía y la cooperación para abordar el cambio climático.

También dijo que Estados Unidos ha estado ayudando en la implementación del acuerdo de paz y podría priorizar “abordar las necesidades de las personas marginadas” para satisfacer los intereses de la administración entrante.

Pero también hay áreas de tensión.

Como candidato, Petro dijo que la estrategia antinarcóticos de Estados Unidos en Colombia fue un fracaso y habló de reformas. Tanto Blinken como Biden insistieron en el tema en sus conversaciones con el presidente colombiano entrante, según los resúmenes oficiales de las llamadas telefónicas. El Secretario de Estado “discutió cómo la estrategia antinarcóticos integrada de Estados Unidos y Colombia se alinea con el objetivo del presidente electo Petro de disminuir la violencia rural”.

Sin mencionar la discusión sobre antinarcóticos, Petro dijo que sostuvo “una conversación muy amistosa con el presidente Biden de los EEUU En sus palabras una relación ‘más igualitaria’ en provecho de los dos pueblos.”

Un día después de hablar con Biden, Petro dijo que habló con Maduro y anunció su intención de reabrir por completo la frontera de Colombia con Venezuela, que actualmente permite un tráfico limitado. Como candidato, prometió normalizar las relaciones diplomáticas con Maduro, una medida vista como problemática dentro del gobierno estadounidense, ya preocupado por el aumento de los flujos de cocaína a Estados Unidos y la presencia en Venezuela de organizaciones terroristas.

“El tráfico ya es una preocupación importante”, dijo Wells. “Obviamente, un cambio en el estado de las relaciones entre los países podría tener un impacto. Los flujos ya son muy altos en este momento, La zona fronteriza es motivo de preocupación. Tienes organizaciones terroristas extranjeras operando en Venezuela, desde Venezuela hacia Colombia”.

“Estas son todos temas que estarían en la agenda para discutir con el nuevo gobierno”, agregó el funcionario del Departamento de Estado.

Por ahora, Petro parece estar disfrutando de la atención. Él compartió en Twitter un reporte de Noticias Caracol subrayando que ningún otro presidente electo en Colombia ha sido contactado tan rápido por un presidente estadounidense desde que George W. Bush llamó a Uribe en 2006 para felicitarlo por su reelección.