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Bandera del arco iris ondea sobre Reichstag berlinés en un multitudinario CSD

Berlín, 23 jul (EFE).- La bandera del arco iris ondeó hoy por primera vez sobre el Reichstag (Parlamento), la Cancillería alemana y otros edificios gubernamentales, incluidos en el recorrido del Christopher Street Day (CSD), el multitudinario desfile del Día del Orgullo convocado en Berlín.

La marcha del colectivo LGTBI -con unos 200.000 asistentes hasta primera hora de la tarde, según cifras policiales- contó con el respaldo tanto del tripartito del canciller alemán, Olaf Scholz -una coalición entre socialdemócratas, verdes y liberales- como de la alcaldía de la capital -otra alianza de socialdemócratas y ecologistas, más La Izquierda-.

Ello se plasmó no solo en la bandera del arco iris sobre las sedes de las primeras instituciones del país, sino también con el apoyo expreso a través de twitter de Scholz y la presidenta del Parlamento, Bärbel Bas, ambos socialdemócratas, así como la ministra de Cultura, la verde Claudia Roth.

La marcha del CSD por Berlín era ya desde hace años la más multitudinarias entre las celebraciones del Día del Orgullo en Alemania. En esta ocasión se percibía, además, las ansias de festejar el regreso a la normalidad tras dos años de restricciones por la pandemia del coronavirus.

El recorrido previsto era de 7,4 kilómetros, con la emblemática Puerta de Brandeburgo como punto de confluencia. Pero además de ese trazado oficial, por el que desfilaron casi un centenar de camiones y caravanas de discotecas y clubs de la capital, todo Berlín parecía invadido por un aire de gran fiesta colectiva, no solo para personas LGTBI.

Desde el jueves empezaron a navegar por el río Spree barcazas equipadas con fuerte megafonía, a modo de prólogo del desfile; en los clubs de tota la capital se programaron asimismo fiestas prácticamente sinfín para todo el fin de semana.

Junto a las proclamas a favor de la plena equiparación de los derechos -que en Alemania siguen teniendo déficit en materia de adopción y herencias, entre otros-, contra la exclusión social o la discriminación, la marcha incluía consignas por la paz, contra la violencia y la guerra.

El exalcalde de la ciudad, el socialdemócrata Klaus Wowereit, había alertado estos días desde diversos medios de la persistente homofobia en la sociedad y de las afrentas que sufren en su día a día los miembros del colectivo. Wowereit accedió a la alcaldía de Berlín en 2001 tras proclamar abiertamente su homosexualidad con la frase "Soy gay y está bien así" en un congreso de su partido.

"Unidos en el amor, contra el odio, la guerra y la discriminación" era el lema central de un desfile marcado por los llamativos disfraces, desde tonos fúcsia o de riguroso latex negro y la música a máximo volumen, propios de los desfiles del Día del Orgullo.

Alrededor de 80 grupos de todo el mundo marcharon a pié y bailaban entre los vehículos de las discotecas. Entre ellos había una presencia destacada de representantes de Ucrania, principalmente personas llegadas a Alemania desde el inicio de la invasión rusa, depositarios de entusiastas muestras de solidaridad por el resto de asistentes.

(c) Agencia EFE