Así atacaron los 'colectivos' de Maduro a quienes protestaban por luz y agua en Venezuela

Hombre de 62 años es atendido tras ser atacado por colectivos cuando protestaba por agua y luz en Caracas el 31 de abril 2019 (Captura pantalla Twitter)
Hombre de 62 años es atendido tras ser atacado por colectivos cuando protestaba por agua y luz en Caracas el 31 de abril 2019 (Captura pantalla Twitter)

En Venezuela este domingo no hubo descanso. Grupos paramilitares reprimieron las protestas por la falta de luz y agua, por orden directa del mandatario Nicolás Maduro, en un intento por contener el creciente descontento popular tras tres semanas del colapso del sistema eléctrico que dejó a Venezuela paralizada y con suministros mínimos de los servicios públicos.

“Sigamos entonces acompañando este plan de 30 días de administración de carga para recuperar nuestro país en paz. Y los movimientos sociales, los colectivos, las UBCH, cívico militares, vamos juntos a los milicianos, a defender la paz de cada barrio, de cada cuadra”, dijo Maduro en cadena nacional.

Al hablar de la “administración de carga“, el líder de la Revolución Bolivariana se refería a un programa especial de cortes de luz programados que, según él, permitirá recuperar la operatividad del sistema eléctrico nacional, que colapsó el 7 de marzo con un apagón nacional que dejó a 30 millones de venezolanos sin luz durante 100 horas. Desde entonces, el gobierno ha sido incapaz de restituir la electricidad en todo el país por más de unas horas.

Para “defender la paz de cada barrio”, mientras Maduro intenta reparar un sistema eléctrico maltrecho por la falta de mantenimiento y la corrupción, los llamados colectivos salieron a las calles con armas largas a reprimir a balazos las protestas populares de comunidades completamente paralizadas por la falta de servicios públicos. Las actuaciones de las fuerzas paramilitares al mando de Maduro dejaron al menos dos heridos en Caracas y un muerto en el Zulia.

Videos y fotografías tomadas por los vecinos mostraron hombres con las caras descubiertas rondando en motocicletas y disparando hacia los manifestantes desarmados. También violentaron puertas de edificios y amedrentaban con sus armas a los habitantes que se asomaban a grabar sus crímenes.

Observadores aseguraron que la actitud desenfadada de “los colectivos” demuestra el total apoyo de las fuerzas gubernamentales. Aunque hacen “el trabajo sucio” que los funcionarios policiales y militares evitan, no temen mostrar sus rostros porque responden a las órdenes del régimen revolucionario.

El Valle, la populosa barriada caraqueña donde creció Maduro, también fue asediada por tanquetas de la Guardia Nacional Bolivariana, que lanzaban bombas lacrimógenas a los que se atrevían a protestar.

Los colectivos también sofocaron las protestas en Cotiza, una parroquia del oeste de Caracas donde en enero se rebeló un grupo de efectivos de la Guardia Nacional Boliviariana.

Los habitantes de la urbanización Sucre de Barquisimeto, estado Lara, a unos 360 kilómetros de la capital, también sintieron el terror ante la presencia de los efectivos de las Fuerzas Especiales (FAES) de Policía Nacional Bolivariana, conocidas por sus violentos allanamientos y ejecuciones extrajudiciales. Fuentes policiales aseguran que el 80 por ciento de las FAES está integrada por civiles entrenados para torturar y matar.

En el estado Zulia, ubicado en el noroccidente de Venezuela, las manifestaciones también fueron reprimidas por las Faes y los colectivos coordinados por el gobernador Omar Prieto.

El diputado Juan Pablo Guanipa confirmó que una mujer de 70 años murió de un tiro en la cara mientras protestaba por la normalización del servicio de agua y luz en el barrio La Polar, en el municipio San Francisco, al sur de la ciudad de Maracaibo.

Los ciudadanos que salieron a protestar en Maracay, estado Aragua, recibieron lluvias de tiros desde vehículos sin identificar. Informes de prensa han reportado al menos dos heridos de bala en esa entidad.

La organizaciones de defensa de derechos humanos Provea ha denunciado la represión violenta de las manifestaciones que considera legítimas por tratarse de la exigencia de servicios públicos esenciales como la luz y el agua.

Pese a la violenta represión de las fuerzas paramilitares de Maduro, el presidente de la Asamblea Nacional y presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, hizo un llamado a los ciudadanos a mantener la protesta en las calles para exigir por “soluciones verdaderas”.