Apoyo masivo a una joven acosada que tuvo que raparse la cabeza porque le tiraron pegamento

Hannah Combs, de 15 años de edad, difícilmente olvidará el pasado 14 de septiembre. Esa fecha quedará marcada a fuego en su vida por culpa de un compañero de colegio que para humillarla, le tiró pegamento a la cabeza.

“Me ardía. Notaba como mi pelo se estuviera quemando. Fue espantoso.”, recuerda esta alumna del instituto Harker Heights de Killeen, Texas (Estados Unidos), en declaraciones concedidas a la web del Killeen Daily Herald.



A pesar de que Hannah corrió a la enfermería del centro, los sanitario poco pudieron hacer por ella: le dijeron que la única solución pasaba por raparse la parte de la cabellera afectada. A pesar de que lloraba sin control, ningún profesor hizo ademán de pedir explicaciones al responsable del ataque. Solo cuando el padre de Hanna -un militar retirado- amenazó con llamar a la policía, las cosas se pusieron en marcha.

Después de las clases, Hannah acudió a un doctor que le diagnóstico quemaduras de primer grado en la cabeza. Para poder tratarlas, la joven tendría que raparse la mitad de la cabeza, algo que para ella era completamente traumático. “Era mi parte favorita de mi cuerpo. Amaba mi pelo. De verdad, era lo único que me gustaba de mí. Y lo he perdido por esto”, confiesa apenada la adolescente.



Al día siguiente, Hannah volvió a clase. Apenas había dormido por el dolor físico y mental. También tenía miedo de encontrarse cara a cara con su acosador.Pero una vez que pisó el instituto descubrió que el atacante había sido expulsado temporalmente. Aunque está decisión le alivió momentáneamente, Hannah supo que su gran deseo no se iba a cumplir: el director del centro le informó que el chico que le había tirado el pegamento iba a seguir siendo su compañero de clase.

Los padres de la víctima han iniciado una campaña para que el acosador sea expulsado de manera definitiva y que se matricule en otro centro alejado. Pero de momento no están teniendo mucho éxito.


Donde sí que están arrasando es en Internet. Jessica, la madre de Hannah, ha publicado en Facebook la historia del ataque y también imágenes de su hija con la cabeza rapada. Y la respuesta de los internautas ha sido brutal: más de 100.000 ‘me gusta’ y varios miles de compartidos han hecho que Hannah pueda sentir el apoyo de la Red. Incluso algunos usuarios han creado la página ‘Justice for Hannah’ (Justicia para Hannah) para que el instituto expulse al matón. Incluso un peluquero se ha ofrecido a cortarle el pelo para que luzca un estiloso corte asimétrico.

La terrible experiencia de Hannah por lo menos le ha servido para saber que su familia, sus amigos y miles de personas la apoyen. El pelo volverá a crecer y seguro que su corazón se fortalecerá gracias a este masivo aliento.

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