Antonio David Flores tiene que pasar por el aro si quiere volver con Marta Riesco

La colaboradora de ‘El Programa de Ana Rosa’ ha dejado muy claras las bases para una posible reconciliación sentimental con Antonio David Flores y es que, mientras él presume con su carnet de accionista de Mediaset (jugada mediáticamente maestra, admitámoslo), ella tiene muy claro que no va a tragar más.

Marta Riesco se sintió humillada cuando Antonio David le dio plantón en su fiesta de cumpleaños, según su versión ella no sabía que él no iba a acudir hasta el último momento y de ahí sus lágrimas en público y su sarta de reproches que propiciaron la ruptura en pleno plató de televisión.

Días después ella contó que Antonio David ni siquiera había llamado y toda esta tristeza añadida a la presión de estar en el ojo del huracán de la prensa rosa la hicieron terminar fatal. Marta se cogió una baja laboral de 15 días para dedicar tiempo a su salud mental y ahora ha vuelto aunque sigue con medicación y seguimiento médico dado que estos altibajos de ansiedad no se curan en dos semanas.

Ahora que la periodista ha vuelto al trabajo y asegura estar más tranquila, reconoce que Antonio David Flores sí ha sabido darle su sitio en algunas ocasiones como cuando admitió su relación con ella, se separó de Olga Moreno, le mandó rosas etc.

Sin embargo Riesco considera que estos gestos no son suficientes y deja muy claras sus condiciones para poder volver a ser pareja con el ex guardia civil: “Estoy siendo bastante clara. Ahora estamos como estamos. Yo estoy soltera. No estamos juntos… a día de hoy no estamos juntos”, sentencia.

Sin embargo la reportera no cierra la puerta a la reconciliación siempre y cuando David pase por el aro de lo que ella considera básico en una relación sentimental: “Si él quiere estar conmigo va a tener que hacer las cosas que yo necesito que él haga para estar conmigo. Yo me he plantado y le he dicho que mi dignidad como mujer me hace que me pare ahora mismo. Porque necesito unos pasos más de los que estás dando”.

Esos pasos que tiene que dar el malagueño son: “Creo que no hay que ser muy listos. Tener una vida fiera de una casa, vivir la vida, disfrutar, viajar, comer, cenar y que a nadie le haga daño eso, y que nadie impida eso. Y principalmente que no lo impida él.”

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Además, Marta afirma: “Tiene que decidir si quiere ser feliz conmigo. Si él está enamorado tendrá que hacerlo y lo vais a ver. Si no lo está, tendrán razón el resto de personas que ha dicho que no lo está.”

“Estoy tirano de un carro del que parece que solo tiro yo. El tiempo dirá si va a querer tirar de mi carro, tirar de otro carro o perder el carro”, comenta Riesco muy segura de sí misma y de lo que quiere en su futuro.

A modo de ultimátum y ya dirigiéndose hacia el hombre que ella todavía ama, Marta sentencia: “Si me amas y me quieres, muévete o si no, no me vas a ver”. Está claro que ella ya ha dejado claras todas las bases que precisa, ahora la pelota está en el tejado de Antonio David quien debe todavía mover ficha.

Lo cierto es que Marta tampoco le pide nada del otro mundo, solo vivir su relación con normalidad dentro de la inevitable atención periodística que van a generar de un modo inevitable. Entiendo que Antonio David eche el freno si eso daña a sus hijos o a Olga pero hace ya siete meses que están separados y él tiene derecho a enamorarse y rehacer su vida otorgando a su nueva pareja el lugar que merece.

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