La antiquísima y trágica leyenda china que es comparada con la historia de Romeo y Julieta

No existe ni una sola persona de origen chino que no haya escuchado o explicado a lo largo de su vida una antiquísima leyenda popular (con una antigüedad aproximada de diecisiete siglos), que se ha ido trasmitiendo desde entonces por tradición oral, una generación tras otra, y que es conocida por muchos como ‘la tragedia de los amantes mariposa’, otros la llaman ‘la historia de Liang Shanbo y Zhu Yingtai’ y hay quien la denomina como ‘el trágico romance de los Romeo y Julieta chinos’.

Escultura representando a Liang Shanbo y Zhu Yingtai 'los amantes mariposas' que se encuentra en Verona  (fotografía tomada por Alfred López)
Escultura representando a Liang Shanbo y Zhu Yingtai 'los amantes mariposas' que se encuentra en Verona (fotografía tomada por Alfred López)

Dicho relato está considerado como una de las cuatro historias más importantes del folclore popular chino, por lo que la misma fue recogida en la lista del patrimonio cultural inmaterial nacional de la República Popular China, además de ser destacado por la UNESCO como una obra representativa del patrimonio oral e inmaterial de la humanidad.

La tragedia de los amantes mariposa nos lleva hasta la Dinastía Jin Oriental (entre los siglos IV y V) en el que Zhu Yingtai, la hija menor de una acaudalada familia de Shangyu(en la provincia de Zhejiang), convence a su padre para ser enviada a la capital y poder estudiar, al igual que habían hecho todos sus hermanos mayores.

El problema radicaba en que en aquella época (y durante muchos siglos después), la educación escolar no estaba permitida a las mujeres. A pesar de ello y tal y como se explica en la leyenda, el padre de Zhu Yingtai fue un hombre comprensivo y accedió a la petición de su benjamina, preparando el viaje de esta hasta la población de Hangzhou, donde estudiaría disfrazada con ropas masculinas. Para ello, la muchacha prometió a su progenitor el no revelar su verdadero género bajo ninguna circunstancia, debido a que podrían padecer graves castigos por parte de las autoridades si llegasen a descubrir que era una mujer en lugar de ser un estudiante varón.

Zhu Yingtai viajó hasta Hangzhou, conociendo a otro estudiante, llamado Liang Shanbo, con quien forjó una estrecha amistad; pero siempre manteniendo en secreto su verdadera identidad femenina y haciéndose pasar en todo momento como otro chico más.

Pero, inevitablemente, con el paso de los meses, Zhu empezó a tener sentimientos hacia Liangque iban más allá de una simple amistad y camarería entre compañeros de estudios y fiel a la promesa que hizo a su padre, no le reveló su verdadera identidad, tramando un plan con el que, en un futuro no muy lejano, poder conquistarlo y estar como pareja junto a él.

Por tal motivo, Zhu Yingtai le comentó a Liang Shanbo que tenía una hermana menor con la que haría muy buena pareja, que le había estado hablando de él por carta y que la muchacha estaba deseando conocerlo en persona, porque empezaba a tener sentimientos por lo que en el correo epistolar le había estado explicando.

Quedaron que una vez terminados los estudios y tras arreglar sus asuntos en la población de donde era originario Liang, éste viajaría hasta Shangyu para conocer personalmente a la joven hermana de su amigo y proponerle matrimonio.

Pero al regresar a su hogar, Zhu Yingtai se encontró con la terrible noticia de que su padre le había concertado un matrimonio de conveniencia (como se realizaba en aquella época) con un joven al que ella no amaba. Por su parte, a Liang Shanbo se le complicaron los asuntos y tardó más tiempo del que esperaba en poder viajar hasta la población de Shangyu para conocer a la hermana de su amigo (que en realidad era Zhu) y proponerle matrimonio.

Cuando Liang Shanbo llegó y se presentó frente al padre de Zhu Yingtai éste lo rechazó como yerno, debido a que ya había cerrado un acuerdo nupcial con el hijo de un alto funcionario de la provincia con el que su hija debería contraer matrimonio en breve.

Según explican las diferentes versiones del relato, Liang y Zhu tuvieron un encuentro secreto, donde ella le reveló toda la verdad, quedando afligidos al ver que no podrían estar juntos por culpa de la boda concertada y que debía celebrarse poco después.

El muchacho, de regreso a su casa, cayó enfermó por el camino, falleciendo y siendo enterrado en aquel mismo lugar.

El día de la boda, Zhu Yingtai, afligida por el dolor de la noticia de la muerte de su amado, pidió que el cortejo nupcial pasase por delante del lugar donde había fallecido Liang y una vez delante de su tumba se originó una terrible tempestad, abriéndose un boquete en el suelo (donde yacía el cuerpo sin vida del joven), aprovechando la muchacha para lanzarse dentro.

De repente la tormenta terminó y de la tumba salieron dos hermosas mariposas que revolotearon entre las flores y se alejaron. Cuando los presentes miraron dentro del sepulcro pudieron comprobar que éste estaba vacío y los cuerpos habían desaparecido, por lo que entendieron que Liang Shanbo y Zhu Yingtai se habían convertido en las mariposas y que volarían juntos para toda la eternidad.

Esta antiquísima y trágica leyenda se ha estado transmitiendo oralmente en China una generación tras otra desde entonces. Muchos son los que se empeñan en intentar demostrar que realmente existió siglos atrás una pareja de enamorados que la protagonizaron, pero no hay suficientes indicios de veracidad, por lo que ha quedado como uno de los relatos más famosos de la cultura folclórica china.

Numerosas son las obras artísticas que se han realizado en torno a esta historia: literarias, musicales, cinematográficas, televisivas, teatrales, pictóricas o esculturas, como la imagen que ilustra este artículo y fue tomada por mí tras visitar la ciudad de Verona, población italiana en la que ocurrió la historia de Romeo y Julieta (dicha escultura se encuentra en el parque frente al museo que alberga la supuesta tumba de Julieta).

Bajo estas líneas podéis visionar una ópera compuesta en 1953 y dedicada a la trágica leyenda de Liang Shanbo y Zhu Yingtai, los Romeo y Julieta de China.

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