Antecentes: el famoso "diputrucho" y otros quorums cuestionables en el Congreso

El diputado nacional dijo que aún no se formalizó su renuncia en el Congreso Nacional ni su nombramiento en la Embajada de Brasil

El diputado nacional y futuro embajador en Brasil, Daniel Scioli, sorprendió a propios y ajenos al sentarse esta tarde en su banca del Congreso Nacional, aquella que obtuvo en 2017 cuando fue el quinto candidato de la lista de Unidad Ciudadana en la provincia de Buenos Aires.

Su presencia en el recinto fue decisiva para que su espacio político, el Frente de Todos, obtenga el quorum necesario para dar inicio a la sesión que concluyó con el voto favorable a la ley que elimina jubilaciones de privilegio a magistrados y funcionarios diplomáticos.

El principal bloque opositor, Juntos por el Cambio, se retiró del recinto tras denunciar que el oficialismo alcanzó el quorum de manera "anormal" y alegó que la designación de Scioli como embajador argentino en Brasil ya fue aprobada en el Senado.

No es un secreto que el exgobernador bonaerense ya se encuentra cumpliendo funciones relativas a su nuevo cargo y por este motivo, desde la oposición señalaron que no está permitido que una misma persona cumpla simultáneamente funciones en el Poder Ejecutivo y en el Poder Legislativo.

Sin embargo, Scioli explicó que su designación como embajador todavía no fue formalizada y que tampoco presentó su renuncia ante la Cámara de Diputados, de modo que aún está habilitado a ocupar su banca: "Desde el 3 de marzo me hago formalmente cargo de la Embajada. Esto no ha sido publicado en el Boletín Oficial y no ha salido todavía el decreto presidencial", dijo el excandidato presidencial.

Juan Abraham Kenan, el "diputrucho"

El curioso episodio que ocurrió esta tarde en Diputados hizo que muchos se acordaran del famoso diputrucho, aquel trabajador del Palacio Legislativo que, sin haber sido electo legislador, se sentó en una banca en 1992 y dio quorum para que se trate el marco regulatorio para privatizar la entonces empresa Gas del Estado.

El hombre en cuestión era Juan Abraham Kenan, un asesor de 72 años del diputado peronista Julio Manuel Samid, quien ingresó al recinto de la Cámara Baja y se ubicó en la banca que solía usar el diputado radical Miguel Marcoli. Con solo sentarse, Kenan activó el sensor del asiento, que permite identificar el momento en el cual se obtiene quorum para iniciar la sesión.

Tras ser advertido por un grupo de periodistas, Kenan salió apresuradamente y brindó una insólita explicación: "No, no soy diputado, pero estaba sentado en una banca porque soy un hipertenso que sufre una afección neurológica crónica y tengo un tajo de 14 centímetros por una operación y me sentí mal".

Diputados de la Unión Cívica Radical presentaron una denuncia ante el juzgado de Néstor Blondi y e impulsaron la creación de una comisión parlamentaria para investigar el hecho, sin embargo, nunca se aplicaron sanciones.

Aparentemente, no fue la única vez que Kenan ocupó una banca del Congreso, en la sesión que permitió la ampliación de los miembros de la Corte Suprema, el asesor habría usado la misma estrategia, aunque en esa oportunidad habrían formado parte de la maniobra tres asesores del entonces jefe de la bancada del peronismo, José Luis Manzano.

Reforma previsional

Mucho más cerca en la historia, ya durante el Gobierno de Mauricio Macri, otro polémico episodio ocurrió en la Cámara de Diputados. Fue en diciembre de 2017 durante la sesión en la cual el oficialismo buscaba aprobar la reforma previsional en medio de una masiva manifestación en las inmediaciones del Congreso.

En esa oportunidad, diputados de la oposición denunciaron que dos legisladores electos, pero que aún no habían jurado , se encontraban sentados en sus bancas. Se trataba de Astrid Hummel y Jorge Enríquez, ambos del oficialismo.

Hummel, del PRO de Santa Fe, reemplazaba a Ana Martínez, quien había renunciado para asumir como concejal de Rosario, mientras que Enríquez reemplazaba a Joanna Picetti, la candidata del oficialismo que había sido excluida de la lista por sus compañeros del frente Vamos Juntos tras las denuncias en su contra por maltrato infantil.

En declaraciones a la prensa, Enríquez y Hummel negaron terminantemente haberse sentado en las bancas para aportar al quórum, sin embargo, varios legisladores de la oposición manifestaron haberlos visto en las bancas y amenazaron con pedir las filmaciones de las cámaras de seguridad para investigar.

Ley de Solidaridad Social

La que hubiera sido la mayor maniobra para obtener quorum en la historia de la Cámara de Diputados, finalmente no se concretó y quedó en el plano de la especulación. Sin embargo, sirve de ejemplo para pensar hasta qué punto llegan las estrategia que se idean para lograr que las leyes avancen o se traben.

En diciembre pasado, poco después de la asunción de Alberto Fernández, la oposición insinuó que no daría quorum para tratar el primer paquete de leyes enviadas por el oficialismo. Durante esa sesión estaba previsto que asuman los reemplazantes de los 23 diputados que habían renunciado para asumir cargos en el gabinete nacional y en los gabinetes provinciales.

Sin esos 23 diputados, y sin la presencia de Juntos por el Cambio, el Frente de Todos no tenía manera de alcanzar el quorum necesario, de modo que analizó la posibilidad de que varios funcionarios, como Felipe Solá, Agustín Rossi, Daniel Filmus y Victoria Donda, renuncien a sus funciones en el Ejecutivo nacional para volver momentáneamente al Congreso, donde aún no se había aprobado su renuncia y de esa manera, alcanzar (junto con sus aliados) el número necesario. Finalmente, no hizo falta ya que Juntos por el Cambio se presentó en el recinto y los reemplazantes pudieron jurar.