Los dos antecedentes de los All Blacks en Mendoza, en la antesala del debut en el Rugby Championship frente a los Pumas
Los All Blacks nunca jugaron en Mendoza un test match y su estadía en esa provincia para visitar el próximo sábado en el estadio Malvinas Argentinas a los Pumas es histórica y se vive con mucha euforia. No es para menos, se trata del seleccionado de rugby más importante del planeta con figuras a nivel mundial, el mismo que hace más de tres décadas, pero con otros representantes, pasó por la tierra del sol y del buen vino en dos oportunidades, en 1976 y 1991, y disputó amistosos contra combinados de la Unión de Rugby de Cuyo.
Ambos encuentros son los únicos antecedentes en esa ciudad en la previa del cruce contra la selección argentina por la primera fecha del Rugby Championship 2023. Para tal objetivo, los rockstars oceánicos llegaron en un vuelo chárter que cruzó el Pacífico, descansan en el hotel Park Hyatt y se entrenan en el Marista Rugby Club, el mismo donde hace 47 años exhibieron por primera vez su talento al pueblo mendocino.
1976
La primera vez que los All Blacks se presentaron en Mendoza fue el 9 de noviembre de 1976 y derrotaron 25-6 a un seleccionado de la Unión de Rugby de Cuyo en la cancha de Marista, club en el que se entrenaron en la previa del test match contra los Pumas por el Rugby Championship.
En la edición impresa del miércoles 10 de noviembre de 1976, el enviado especial de LA NACION, Alberto Fidalgo, detalló que el encuentro los presenciaron 2000 personas y describió la actuación de ‘los hombres de negro’ como “opaca” a consecuencia de que “solo siete jugadores” repitieron en la formación de los que previamente habían disputado dos encuentros contra el combinado nacional. “Parecían otro equipo, sin ideas, sin esa excepcional continuidad que los caracterizó en su gira por nuestro país”, precisó.
A su vez, destacó que la “pálida labor” se debió a lo que hizo el elenco mendocino en la cancha: “Le hizo un juego similar al que ellos practican y no se quedaron atrás en la asperezas. Sus backs marcaron a presión e impidieron la salida de los medio scrum y del apertura. Así nivelado el juego, solo la extraordinaria puntería de Wilson situó a su equipo en una ventaja desmesurada en el primer tiempo (12-6)”.
“En la segunda etapa -continuó- Cuyo se soltó, olvidó inhibiciones y dominó durante los primeros 15 minutos. Los locales llegaron a superar a los neozelandeses en los impetuosos choques y hasta hicieron llegar la pelota a los wings. Dos tries se perdieron, uno por fallas de manos y otro por knock-on”. Por último, narró que la potencia física de los oceánicos sacó de la cancha a tres rivales -Terranova, Antonini y Massera- por sendas lesiones.
Síntesis
Cuyo (6): Muñiz; Massera (Stahrínger), O. Terranova (E. Terranova), Tarquini, Morgan; Guarrochena, Chacón; Navessi (capitán), Nassazzi, Antonini (Viazzo); Serpa Cattaneo; Irañeta, Crivelli y Michelli. Entrenador: E. Martínez.
All Blacks (25): R. Wilson; S. Cartwright, E. Stokes, R. Rollerson, K. Granger; K. Greene, J. Brake S. Cron, G Mourie (capitán), P. Ryan; A. Haden, V. Stewart; J. Spiers, J. Black y J. Me Elowney. Entrenador: J. Glesson.
Cancha: Marista.
Árbitro: Felipe Ferrari (Buenos Aires).
Tantos: dos penales de Guarrochena (C); tries de Black y Wilson, drop de Rollerson y una conversión y cuatro penales de Wilson.
1991
La segunda ocasión en el que la selección de rugby de Nueva Zelanda pisó Mendoza fue el 2 de julio de 1991, también para jugar un amistoso contra un combinado de Cuyo, al que derrotó 47-12 en la cancha del club Independiente Rivadavia. El cotejo se jugó en el marco de una gira que el combinado oceánico hizo por el país y concluyó con un test match frente a los Pumas. La preparación incluyó, previamente, triunfos sobre Rosario, Córdoba, Buenos Aires, Tucumán y los Pumas B, además de Mendoza.
En su edición impresa del 3 de julio de ese año, LA NACION publicó una crónica del cotejo en el que brindó detalles de cómo se desarrolló: “La resistencia de los locales duró un cuarto de hora, lapso en el que se vivieron los momentos de mayor equilibrio. Luego, la mejor performance de los forwards visitantes inclinó el desarrollo en su favor y, como consecuencia de ese persistente dominio, fueron llegando los tries”.
Y agregó: “Conseguida una ventaja importante, el juego de los campeones del mundo sufrió una leve declinación, que fue aprovechada por el equipo mendocino, el cual en los últimos minutos situó las acciones en el terreno adversario y se dio el enorme gusto de anotar un try a través de Sergio Gómez”. La anotación de los cuyanos desató una gresca, precisa el informe, que le provocó “una lastimadura en la cara” al propio Gómez. La situación generó “silbidos” para los visitantes y, en contrapartida, aplausos para los locales por cómo levantaron su nivel en el epílogo del duelo.
Síntesis
Cuyo: F. Lola; Bazzana, C. Cipitelli (Capitán), Cremaschi, E. Saurina; Gioeni, F. Silvestre; M. Bertranou, S. Gómez, M. Cassonel P. Pérez Caffe, G. Correa Llano; P. Miranda, A. Gutiérrez, y F. Mendez. Entrenadores: Terranova y Crivelli.
All Blacks: K. Crowley, J. Timu, J. Stanley, B. McCahill, S. Philpott; S. Mannix, G. Bachop; P. Henderson, M. Jones, A. Whetton; I. Jones, G. Whetton (Capitán); R. Loe, S. Fitzpatrick; y S. Mc. Dowell. Entrenador: Wyllie.
Árbitro: Paul Bleckwedel (Tucumán).
Tantos: try de Gómez convertido por Cremaschi, quien también acertó dos penales (C); tries de Timu y Fitzpatrick por duplicado y de Philpott y Mannix más cuatro conversiones, cuatro penales y un droap de Crowley.