PARÍS (AFP).- Un hombre sacó un cuchillo este jueves en medio de un parque cerca del lago de Annecy, al este de Francia, en los Alpes, e hirió a cuatro niños, entre ellos un bebé que se encontraba en su cochecito. Dos de los menores se encuentran en grave estado, al igual que un adulto que también fue agredido por el sujeto cuando se daba a la fuga. Una segunda persona mayor de edad fue atacada pero se encuentra fuera de peligro.

El hecho se produjo hoy hacia las 9.45 -hora francesa-, cuando niños de entre 22 meses y unos tres años estaban en los Jardines de Europa, un lugar que suele ser muy frecuentado. De acuerdo con las primeras versiones sobre el caso, quedaron internados en grave estado una persona mayor de edad y dos de los menores, que se encuentran con peligro de muerte.

“Mi hijo de 17 años lo presenció. Una persona blandió un cuchillo y apuñaló a un bebé en su cochecito. Después vio una multitud, gritos, sangre”, relató una madre que acudió a buscar a su hijo a la prefectura. El agresor gritó “en nombre de Jesucristo” en inglés cuando atacó, según un video consultado por AFP. Entre los menores heridos, habría uno de nacionalidad neerlandesa y otra víctima de nacionalidad británica.

Tras el episodio, el hombre fue detenido por la Policía y tras ello identificado: nació en 1991, es de nacionalidad siria y vivió diez años en Suecia, donde obtuvo el estatuto de refugiado el pasado 26 de abril, aunque también había solicitado el asilo en Francia en noviembre, según una fuente policial.

Cuando fue arrestado, lucía una cruz cristiana; en su expediente de solicitud de asilo se declaró como “cristiano de Siria”, informó una fuente policial.

Testigos interrogados por la cadena BFMTV señalaron que el atacante intentó huir del parque después de la agresión y que en ese momento fue contra una persona mayor, antes de ser abordado rápidamente por la Policía.

“Quería atacar a todo el mundo. Me aparté y se abalanzó sobre un abuelo y una abuela, y apuñaló al abuelo”, declaró Anthony Le Tallec, exjugador del Saint Etienne y del Liverpool, al diario regional Le Dauphiné libéré. El exfutbolista, que corría a orillas del lago cuando ocurrió el ataque, describió un escenario de “pánico total” y aseguró que el agresor, de “unos cuarenta años”, llevaba “una bandana o un turbante” que se quitó delante de él.

Por su parte, el diario regional precisó que las víctimas fueron trasladadas al Hospital Annecy Genevois y los testigos, a un edificio próximo al lugar del siniestro, que se encuentra ahora acordonado.

Mensaje de Macron y preocupación en la política

Poco después de lo ocurrido, el presidente francés, Emmanuel Macron, se refirió al hecho y escribió en un posteo en sus redes sociales: “Ataque de absoluta cobardía esta mañana en un parque de Annecy. Niños y un adulto están entre la vida y la muerte. La nación está en estado de shock. Nuestros pensamientos están con ellos, con sus familias y con los servicios de emergencia movilizados”.

En tanto, la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, y el ministro del Interior, Gérald Darmanin, confirmaron que se desplazarán a la turística ciudad de los Alpes, de unos 140.000 habitantes.

De la izquierda a la extrema derecha, los líderes políticos condenaron el ataque y expresaron su solidaridad con las víctimas y sus familiares. Los representantes en la Asamblea Nacional incluso hicieron un minuto de silencio.

En un contexto de tensión política sobre una futura reforma migratoria, el líder del partido opositor de derecha Los Republicanos (LR), Éric Ciotti, que aboga por endurecer el asilo, urgió este jueves a “sacar las consecuencias” del ataque “sin ingenuidad, con fuerza y lucidez”.

La justicia abrió una investigación por intentos de asesinato, al descartar por el momento el “móvil terrorista”, dijo la fiscal de Annecy, Line Bonnet-Mathis, en una rueda de prensa.

Francia fue blanco de una serie de traumáticos ataques yihadistas en la última década, como los perpetrados contra la revista satírica Charlie Hebdo, el Stade de France, la sala de conciertos Bataclan en 2015, y la ciudad de Niza, al sureste, en 2016. Más recientemente, la decapitación de un profesor a plena luz del día en 2020 cerca de su escuela a las afueras de París, a manos de un refugiado checheno, provocó una oleada de dolor y un debate nacional sobre la influencia del islam radical en Francia.