Algunos consumidores no saben cómo elegir un protector solar

Por Lisa Rapaport NUEVA YORK (Reuters Health) - Un equipo entrevistó a pacientes de una clínica dermatológica en 2014 y determinó que casi todos habían comprado un protector solar el año anterior. Pero menos de la mitad pudo identificar en las etiquetas el nivel de protección contra el cáncer de piel y las quemaduras. La doctora Roopal Kundu, investigadora de la Escuela de Medicina Feinberg de Northwestern University, Chicago, recomendó buscar dos datos en las etiquetas: que el producto sea "de amplio espectro", lo que significa que protege de los rayos ultravioleta A(UVA) y B(UVB), y el factor de protección solar (SPF, por su nombre en inglés) que indica la efectividad del protector contra los rayos UV. "La clave es que el producto sea de amplio espectro, con un SPF 30, que le guste al consumidor y repita su aplicación cada dos horas cuando está al aire libre", enumeró Kundu vía e-mail. Si una persona pasará mucho tiempo en el agua, "es importante que el protector sea resistente al agua". Los CDC de Estados Unidos informan que el cáncer de piel es el tumor más común y la principal causa evitable es la exposición a la luz UV del sol o de fuentes artificiales, como la cama solar. Los rayos solares comienzan a dañar la piel a los 15 minutos y la mejor protección es la sombra o cubrir la piel. El equipo de Kundu entrevistó a 114 pacientes atendidos en su clínica entre junio y agosto del 2014. La mayoría era de piel blanca. Tres cuartos nunca habían padecido cáncer de piel y dos tercios no tenía antecedentes familiares de la enfermedad, según publican los autores en JAMA Dermatology. El 29 por ciento dijo que utilizaba pantalla solar todos los días, sólo el 5,3 por ciento reaplicaba el producto durante el día, todos los días. El 55 por ciento leía las etiquetas antes de comprar: le prestaba atención al SPF, las fórmulas para piel sensible, resistentes al agua y a la transpiración, y el precio. Cuando el equipo les mostró una etiqueta para que la interpretaran, el 92 por ciento dijo correctamente que el protector con SPF alto protege de las quemaduras y 72 por ciento acertó en que eso previene el cáncer de piel. Pero al preguntarles cómo saber si un producto protege del cáncer de piel, apenas el 38 por ciento buscó el valor de SPF o que fuera de amplio espectro. El 55 por ciento respondió correctamente al decir que hay que aplicar la cantidad de protector que entra en un vaso de trago corto. El equipo también les mostró una etiqueta con otro diseño y un sistema de calificación con entre una y cuatro estrellas para conocer el valor de SPF. La mayoría pudo identificar el nivel de protección correcto. "El estudio demuestra que los consumidores podrían interpretar la calificación de los rayos UVA (sistema de estrellas) que aporta información extra del nivel de protección de la pantalla solar", dijo Kundu. El doctor Steven Wang, dermatólogo del Centro de Oncología Memorial Sloan Kettering, Basking Ridge, Nueva Jersey, opinó que es alentador que muchas personas puedan interpretar las etiquetas de los protectores solares, pero dijo que un dato clave para prevenir el cáncer de piel no aparece en el envoltorio. "La cantidad (utilizada) es el factor más crítico y no aparece en la etiqueta", indicó Wang, que no participó del estudio. FUENTE: JAMA Dermatology, online 17 de junio del 2015.